Billete de $100 mil todavía es un ilustre desconocido para muchos colombianos

Marisol Henao es jefe de contabilidad en una empresa de productos químicos en Cali y dice que tomó en sus manos un billete de $100.000 cuando retiró cierta cantidad de dinero de un banco para completar la cuota inicial del Renault Logan que compró hace dos meses.

Así como lo recibió lo entregó minutos después al concesionario. “Esa fue la primera vez que lo vi y hasta ahora no ha pasado por mis manos otro billete de esa denominación”, dijo.

“Ese billete es un verdadero encarte. Comprar algo barato con él o pagar una carrera de taxi es un dolor de cabeza”, comentó la sicóloga Gloria Gordillo, quien sostuvo que solo lo ha tenido una sola vez en su cartera.

Lo que ellas, y tal vez muchos no saben, es que el billete de $100.000 completa a finales de este mes tres años de estar en circulación.

¿Entonces por qué casi no se ve en las calles y en el comercio? La pregunta tiene varias respuestas.

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En primer lugar, el Banco de la República informó que desde el año 2016 (año en el que entró a circular en la economía) ha ido ingresando al mercado de manera gradual a través de los bancos y en segundo lugar, como se trata del billete de más alta denominación en el país su uso está orientado a atender operaciones o transacciones de alto valor, no para pagar obligaciones de menor cuantía, como el transporte público o adquirir bienes en una tienda de barrio.

Sin embargo, hay cuantías que no llegan a los seis ceros y claramente se pueden cubrir con dichos billetes. “No es que no se pueda usar para obligaciones pequeñas, el tema está en las vueltas, por eso la recomendación es que se destine a cancelar artículos o servicios que superen los $100.000”, dijo la economista Esperanza Ramírez.

El vicepresidente técnico de la Asociación Bancaria y de Entidades Financieras de Colombia (Asobancaria), Alejandro Vera, reiteró que una de las razones por las que el billete de $100.000 pesos aún no se ve frecuentemente en la economía del país es porque no ha sido emitida la totalidad de piezas producidas por el Banco de la República.

“Los colombianos no han visto mucho este billete porque del total de piezas emitidas por el Banco de la República, aproximadamente 29 millones corresponden a los billetes de $100.000, lo cual es muy bajo y representa un porcentaje menor en la economía y no se ve frecuentemente en el mercado”, explicó.

El economista y experto en sistemas financieros de la Universidad Javeriana, César Ferrari, resaltó que el uso de medios electrónicos puede incidir en que los pagos tampoco se realicen con ese billete.

Los bancos lo entregan en la medida en que sean demandados por los clientes. Por lo tanto es normal que no sea una denominación que se utilice en las transacciones diarias de bajo valor. Es un comportamiento normal con los billetes de alta denominación en cualquier país, anotó el Banco de la República. Por ahora el billete está circulando en mayor medida en las ciudades grandes como Bogotá, Medellín, Cali y Barranquilla, donde el público puede encontrarlo en las ventanillas de los bancos.

En el 2016 el Banco de la República emitió 44,2 millones de piezas de billetes de $100.000, de los cuales al cierre de 2018 solo habían en circulación 29,4 millones de piezas, lo que representa el 66 % del total.
Esta cifra es muy inferior respecto a los billetes de $50.000, del cual se encuentran circulando 654,1 millones de piezas de los nuevos y 587,2 millones de piezas de la antigua familia.

“Pese a ello, la circulación del billete de $100.000 crece anualmente de manera importante. La cantidad puesta en circulación en el primer año (2016) fue de 4,5 millones de piezas; en el año 2017 entraron a circular 5,4 millones de piezas más y el año pasado entraron 19,4 millones de piezas adicionales, para que en la actualidad estén circulando cerca de 30 millones de piezas en el país”, explicó el Emisor.

Pero no todos los analistas piensan que se trata de un billete de gran denominación y por eso circula poco.

El docente de la Universidad Javeriana César Ferrari dijo que no es que el billete sea de una gran denominación si se compara con el dólar, ya que $100.000 representan aproximadamente poco más de US$30.
Resaltó que en países como Estados Unidos circulan en la actualidad billetes de US$50 y US$100 sin ningún problema.

“Otra de las razones que podrían estar relacionadas es que al ver un billete que no circula mucho y que es raro, la gente decide guardarlo o ahorrarlo, lo cual puede llevar a que se vea como una especie de novedad o colección, pero lo más probable es que la emisión ha sido muy pequeña y en pocas transacciones se agotan. Esto conlleva a que no tenga una mayor circulación en la economía”, indicó.

El billete es el más grande (en tamaño) de toda la nueva familia que emitió el Emisor y por esa razón ha impedido que sea entregado por esos medios electrónicos pese a las inversiones que han venido realizando las instituciones financieras para actualizar la tecnología de sus cajeros automáticos con el fin de disponer de esta denominación para el público.

“Cada banco tiene la potestad de definir cómo actualizar y solucionar sus cajeros automáticos electrónicos y eso depende mucho de los estudios de demanda que se hagan para evaluar si es viable o no disponer de billetes de $100.000”, explicó el ejecutivo de la Asobancaria.

Para el Banco de la República el ajuste que debe hacerse a los cajeros es similar al que ya se hizo en la mayoría de estas máquinas para el resto de denominaciones de la nueva familia de billetes que están circulando en el país.

“Los bancos comerciales dieron prioridad a los ajustes en los cajeros para las denominaciones que ya venían dispensando como los de $50.000, $20.000 y $10.000 y entendemos que en este momento algunos ya están considerando realizar las adecuaciones pendientes para incorporar también en la dispensación el billete de $100.000”, explicó el Banco de la República.

Aunque todo parece indicar que dicho billete se verá un poco más en las calles, la apuesta de la banca está en otro lado, dicen analistas.
“ La mira está puesta en impulsar y avanzar en los pagos y transacciones a través de medios electrónicos porque genera menores costos para los usuarios y una menor elusión tributaria”, dijeron.

Tiene la imagen en homenaje al expresidente de Colombia Carlos Lleras Restrepo, así como del Valle de Cocora en Quindío, la palma de cera (árbol nacional), el pájaro barranquero y la flor del sietecueros.

El verde es el color predominante del nuevo billete y presenta cambios de tonalidad.

Sus dimensiones son 66 milímetros x 153 milímetros, las más grandes de la nueva familia de billetes del Banco de la República.
El material en el que se imprime el billete es papel hecho 100 % de fibra de algodón.