Las reservas comerciales de petróleo de Estados Unidos aumentaron en 5,5 millones de barriles la semana pasada, según cifras divulgadas el miércoles por la Agencia estadounidense de Información sobre Energía.

Los datos oficiales socavaron el impulso que habían cobrado los precios del crudo al inicio de la sesión.

Así las cosas, este miércoles 7 de febrero, el dólar arrancó en $3.948,00, una caída de $8 frente a su cierre del martes de $3.956,00.

Pero al final de la sesión, la moneda terminó con un ascenso hasta los $3.960,00, es decir, un 0,10 % o $4 más, si se compara con el martes.

Al final de la sesión, la moneda terminó con un ascenso hasta los $3.960,00, es decir, un 0,10 % o $4 más, si se compara con el martes.

En su máximo precio de la jornada llegó a los $3.974,63. Y tuvo un precio mínimo en $3.942,30, el cual no alcanzó a bajar de la barrera de los $3.900.

Por su parte, el precio promedio, que es la base que se tiene para determinar la Tasa Representativa del Mercado, también quedará arriba de los $3.900, específicamente en $3.962,31, $11,74 o 0,29 % menos que la TRM que rige este miércoles que está en $3.950,57.

Más temprano, el barril del American West Texas Intermediate (WTI) subía 0,25% en Nueva York hasta 73,50 dólares, tras haber llegado a incrementarse hasta 1,24% poco antes.

Otro factor es el aumento de la producción estadounidense de oro negro, que alcanzó los 13,3 millones de barriles diarios, frente a 13 millones de la semana anterior.

Se trata de un récord absoluto para Estados Unidos, que ya había alcanzado marcas históricas a fines de diciembre y a principios de enero, antes de que el paso de un frente frío perturbara la extracción en determinadas regiones del país.

El crecimiento de las reservas comerciales fue causado también por una mayor desaceleración de la actividad de refinerías, cuya tasa de uso cayó al 82,4% frente al 82,9% previo.

El lapso entre finales de enero e inicios de febrero corresponde tradicionalmente a la temporada de mantenimiento de las refinerías, muchas de las cuales ven reducidas sus capacidades.

El lapso entre finales de enero e inicios de febrero corresponde tradicionalmente a la temporada de mantenimiento de las refinerías, muchas de las cuales ven reducidas sus capacidades.

*Con información de AFP