La quiebra o insolvencia es un complicado escenario que muchas de empresas tratan de evitar, pese a que siempre están expuestas a ello. Y es que, de un momento a otro, ya sea por problemas en el mercado, una crisis mundial en su sector o un mal manejo de sus finanzas, se puede desmoronar la organización.
Un ejemplo de lo anterior que generó preocupación en muchas personas es el banco internacional Zhongzhi Enterprise Group (ZEG), que se encuentra ubicado en China y había sido uno de los pilares de las empresas inmobiliarias del país asiático y ahora se había declarado en insolvencia, tras evidenciar fuertes problemas financieros.
Según informó la British Broadcasting Corporation (BBC), tras conocer el anuncio de la compañía al acogimiento de la ley de quiebras, funcionarios chinos y distintos organismos de control se dieron a la tarea de iniciar una investigación con el fin de determinar algunos presuntos delitos ilegales que se habrían cometido dentro de la empresa durante noviembre del 2023.
El grupo se refirió a varias dificultades que reportaron los inversionistas, que por medio de una carta dieron el reporte de deudas que ascendían hasta los 64.000 millones de dólares, valor que superaba con creces el monto de su patrimonio, que se estimaban en cerca de 38.000 millones de dólares.
Y es por esa razón que el pasado viernes un tribunal de Beijín dio a conocer una declaración en la que reportan que los activos de la empresa son insuficientes para poder pagar las deudas y seguir teniendo su operación con total normalidad.
Es fundamental recordar que el ZEG es una de las entidades más importantes en el mercado bancario de la China, ya que, a pesar de los préstamos informales, ha acaparado la economía china y después del 2008 la banca formal empezó a tener una mayor popularidad. Incluso, según lo que asegura el mismo portal, la industria bancaria clandestina mueve cerca de 3 billones de dólares.