En junio, el indicador de confianza del consumidor para los hogares de las 23 principales ciudades llegó a 38,4 puntos, un incremento de casi 3 puntos frente al valor de mayo cuando fue de 35,4 informó el Dane.
De acuerdo con la información presentada por la entidad, la finalización del ciclo político contribuyó a mejorar el indicador.
Este resultado tiene que ver con la percepción económica de los ciudadanos para los próximos doce meses, pues tuvo un importante repunte, pasó de 40,5 puntos en mayo a 49,9 sobre 100.
Juan Daniel Oviedo, director del Dane, destacó que, sin embargo, continúan las presiones inflacionarias pese a la mejora en la corrección general.
Asimismo, durante el sexto mes del año, el 47,6% de los hogares manifestó que su situación económica actual era peor o mucho peor que hace un año. Oviedo aseguró que eso es una mejoría dado que al inicio de la pandemia este porcentaje era superior a 70%.
Con respecto a las expectativas a futuro, hay un incremento en el optimismo de los hogares encuestados, pues 33,4% del total afirmaron que la situación de su hogar puede ser mejor o mucho mejor en un año.
Por su parte, a nivel de país, persiste un “marcado deterioro de la percepción económica del presente”, dijo Oviedo, comparada con la que se percibía hace 12 meses, pues 62,7% considera que la situación de Colombia es hoy peor o mucho peor que hace un año.
Lea además: Fedesarrollo subió a 5,5% su expectativa del PIB del país para 2022
Otro de los apartados de esta encuesta tiene que ver con los precios. En este caso, 68,9% los hogares encuestados aseguraron que, en los siguientes 12 meses, los precios van a aumentar al mismo ritmo que ahora o incluso más rápido.
“Esto quiere decir que todavía tenemos unas expectativas inflacionarias altas de los jefes del hogar. Esto significa que por esto se puede dar casi por hecho que, en julio, la inflación podría alcanzar el doble dígito.
En cuanto a las posibilidades para adquirir productos de primera necesidad, el 63,1% de los hogares cree no tener mejores condiciones económicas para adquirir estos artículos. Esto, de acuerdo con Oviedo, responde a que el panorama inflacionario está golpeando a los hogares.
Cabe recordar que, en junio, el índice de precios al consumidor llegó a 9,67%, el más alto en 22 años, impulsado principalmente por el precio de los alimentos.
Por otra parte, la entidad estadística reportó que 51,3% de los jefes de hogar consultados aseguró haber trabajado durante los últimos siete días. Esto contrasta con 5,8% que afirmó estar buscando un trabajo. “Este resultado está 5,2 puntos porcentuales por debajo de los resultados del mes anterior”, afirmó Oviedo.