Muchos productores de petróleo tuvieron que deshacerse este lunes de las reservas de crudo que tenían previstas para entrega en mayo, ante la imposibilidad de almacenar más. Por esto, muchos de estos actores entregaron a sus compradores el 'oro negro' a precios negativos, es decir, prácticamente pagaron para que los compradores recibieran las entregas de mayo.
Esto provocó que el petróleo de referencia WTI con fecha de entrega en mayo cayera este lunes a un precio de -US$37,63 en el mercado de Nueva York, una cifra histórica.
Sin embargo, el petróleo que se prevé vender en el siguiente mes, junio, sigue en terreno positivo, en un precio de US$20,43, pues los productores esperan que en las próximas semanas pueda mejorar la demanda de crudo en el mundo, y puedan empezar a entregar el petróleo acumulado.
Esa caída de los precios para mayo ocurrió este lunes porque el martes cierra el período de contratos para vender en mayo, y entonces los productores tienen dos opciones: vender el petróleo o almacenarlo para venderlo más tarde.
Lea también: 'El petróleo WTI alcanza su mínimo histórico, cerró la jornada a -37,63 dólares el barril'.
Sin embargo, las reservas de crudo en Estados Unidos están cerca del límite tras un fuerte aumento en las últimas semanas, lo cual hace el almacenamiento de oro negro más difícil y caro.
La Agencia de Información sobre Energía (AIE) de Estados Unidos aseguró que las reservas de petróleo subieron en 19,25 millones de barriles la semana pasada en el principal productor y consumidor mundial de oro negro. Se trata del mayor incremento desde que se llevan estas estadísticas.
La consultora Rystad Energy consideró el lunes que no queda espacio para más de 21 millones de barriles en la terminal de Cushing (Oklahoma, sur), donde se almacena el crudo referencia del WTI.
Ante esta situación inédita debida a la caída de la demanda por la pandemia de coronavirus y un mercado con sobreoferta, los barriles para entrega en mayo perdieron todo su valor y los inversores quieren deshacerse de ellos y tienen que pagar para hacerlo.
"Actores de talla media pagan a los 'compradores' para deshacerse de sus volúmenes de petróleo porque el límite físico de reservas está por alcanzarse. ¡Y pagan caro!", explicó la analista Louise Dickson, de Rystad Energy.
Para esa especialista esto significa que "cierres costosos, incluso quiebras, podrían costar menos caro a algunos productores que pagar decenas de millones de dólares para deshacerse de lo que producen".
Quienes pueden almacenar y vender más tarde apuestan a que las cotizaciones subirán después, y que el consumo mundial de crudo y productos refinados retomará con la reactivación de la economía.
Esta situación se traduce por un fenómeno de reporte, con precios que suben a medida que el plazo del contrato es más lejano en el tiempo.
Por eso, el contrato de WTI para entrega en julio terminó en 26,28 dólares y el de agosto en 28,51 dólares.