El pasado 21 de diciembre se graduaron 200 estudiantes bajo la modalidad de neoeducación, en Cali. Se trata de un nuevo modelo educativo que toma elementos de la virtualidad y el aprendizaje presencial.
Esta nueva propuesta académica surgió ante la necesidad de replantear la educación tradicional. Promete más cobertura en menos tiempo y a bajos costos, de esta manera, las universidades que operan con esta modalidad les ofrecen a sus estudiantes la oportunidad de graduarse en dos años, menos de la mitad de lo que tardarían en otra institución y con flexibilidades de pago.
“Utilizamos días festivos, pero no hay periodos vacacionales cada semestre, de esta forma reducimos los tiempos de estudio a solo diez meses para una carrera tecnológica y dos años para una carrera profesional, además, los graduados pagan la totalidad de sus estudios sin necesidad de acudir a fiadores, con créditos directos con la universidad”, explica Luís Carlos Gutiérrez, Vicerrector de investigación de la Universidad San José, la primera neo universidad colombiana.
Lea aquí: Los retos del Gobierno Petro para garantizar los derechos escolares
Asimismo, los alumnos se preparan aprovechando el uso de las tecnologías de la información y comunicación (TIC), apps, programas, chatbots, encuentros sincrónicos y asincrónicos, entre otras herramientas. Las clases son dictadas por un avatar diseñado con algoritmos genéticos que imitan los comportamientos humanos, el cual es capaz de responder puntualmente las preguntas de los estudiantes.
“Tenemos la gran ventaja de recibir las clases en tiempo real, con la tutoría del profesor, pero si por alguna razón no tenemos esa oportunidad podemos acceder a la plataforma para revisar las clases de la materia correspondiente, permite optimizar el tiempo porque no hay que desplazarse a la universidad”, relató John Fredy Gutiérrez, egresado del programa de ingeniería de sistemas, de la Universidad San José, en diálogo con El País.
En Colombia, 4,500 alumnos recibieron su diploma este 2022, luego de cursar sus estudios en la modalidad de neoeducación. A los graduados se les entregó un acta de grado digital con código BlockChain, válido para 79 países. “La BlockChain posee una estructura matemática que es casi imposible de falsificar, nosotros entregamos los documentos en físico, pero también hacemos uso de esta tecnología para que ninguna persona pueda falsificar”, explica Gutiérrez.
La Universidad San José ocupó la cuarta posición en las últimas evaluaciones TyT.
Finalmente, la meta para los próximos años es ofertar programas académicos en Colombia que cuesten solo 1 dólar y ampliar la cobertura a otros países de Latinoamérica.