El gran perdedor del plebiscito electoral de este domingo, no solo en Bogotá, sino a nivel nacional, es el presidente Gustavo Petro y el sector político que lo acompañó en su ascenso al primer cargo del país.
A poco más de un año de haber sido elegido presidente de la República, los candidatos del Pacto histórico y las coaliciones en las que hubo alguna huella del petrismo recibieron una derrota estruendosa en las principales alcaldías y gobernaciones del país.
Los fracasos más representativos fueron los que se dieron en las principales capitales colombianas: Bogotá y Medellín. En el primer caso, a Gustavo Bolívar, petrista a ultranza, no le alcanzó siquiera para el cupo al concejo y se quedó con el tercer lugar en la votación.
Esa derrota la reconoció el propio Gustavo Bolívar al asegurar tras reconocer el triunfo de Carlos Fernando Galán que: “siento que fue un voto castigo hacia el Pacto Histórico, pero al final de cuentas el Pacto Histórico se va a fortalecer y al final de este gobierno se darán cuenta de que la gente va a volver a creer en el pacto”.
Por su parte, la alcaldesa de Bogotá, Claudia López, le puso el moño al pastel de la disputa que ha tenido en los últimos días con Gustavo Petro con un mensaje contundente tras conocerse el triunfo de Galán en primera vuelta. “Si querían un plebiscito, ahí lo tienen”, escribió la mandataria en referencia a la propuesta de Gustavo Petro de adelantar un plebiscito para preguntarles a los bogotanos si quieren un metro subterráneo, el tema que se convirtió en eje de esta campaña.
Al respecto, el alcalde electo de Bogotá, Carlos Fernando Galán, le dijo a Gustavo Petro en su discurso de victoria: “Presidente Petro, este es un mandato claro, y le pido respetuosamente que trabajemos para sacar adelante esta primera línea del metro como está planteada”.
Para el docente y politólogo Diego Luis Sánchez, “hay unos fenómenos interesantes en Bogotá, especialmente en las localidades de Kennedy, que fue el portal resistencia en los levantamientos populares de hace un par de años y hoy consolidan la candidatura de Galán. Esto es un indicador claro de lo defraudada que se siente la gente por el gobierno que escogieron y que no les ha cumplido con todos los elementos que profesaron en algún momento”.
“Este era claramente un fenómeno plebiscitario porque estamos notando una respuesta consolidada a nivel nacional y esos que eran los bastiones de la izquierda consolidados para la campaña del presidente Gustavo Petro hace cuatro años; es decir, las ciudades capitales y otras ciudades importantes del país que contaban con gobierno cercanos a la izquierda y que participaron de la elección del presidente Gustavo Petro, hoy están cediendo ante la derecha en Colombia”, explica Sánchez.
Sopa y seco en Medellín
La otra gran vergüenza del petrismo fue la que sufrió en Medellín donde el candidato oficial, el ungido por Daniel Quintero, fue apabullado por Fico Gutiérrez, pese que Quintero renunció a la Alcaldía semanas antes para salir a impulsar a Juan Carlos Upegui.
Con más de 60 puntos porcentuales, los habitantes de la capital antioqueña le cobraron al petrismo de Daniel Quintero las decisiones que según analistas retrocedieron varios años, muchos de los avances logrados recientemente por alcaldes como Sergio Fajardo y el mismo Fico Gutiérrez ocho años atrás.
“Aceptamos los resultados con humildad. Felicito a Federico Gutiérrez. Medellín ha enviado un mensaje claro y contundente. Vamos a reflexionar sobre los resultados, reconocer los deseos de la gente”, escribió Daniel Quintero en su cuenta en X.
Si bien estas elecciones tienen un efecto directo en el desarrollo de la política del actual gobierno, asegura Jorge Luis Yarce, analista y politólogo, es un desarrollo a futuro en los diálogos y en los acercamientos que tiene que hacer el gobierno del presidente Gustavo Petro con los nuevos gobernantes locales y territoriales, pero no se pueden confundir las elecciones nacionales y los fenómenos locales, que responder a otras lógicas a las maquinarias y a las necesidades locales y eso es un reflejo de lo que estamos viendo. En ese sentido, no podemos entonces decir que el gran derrotado sea el presidente Gustavo Petro.