Cara Delevigne, la modelo británica de 26 años, se convirtió en tendencia este viernes por su arriesgada pero muy acertada elección para asistir a la boda de Eugenia de York, miembro de la familia real de Gales, al escoger un esmoquin negro y acompañarlo con tacones y un sombrero de copa que le hacían juego.
Así demostró que quienes piensan que las mujeres solamente pueden usar un vestido y lucir hermosas en un evento formal, se equivocan.
Una chaqueta negra corta sobre una camisa blanca, corbata, faja de satín y unos pantalones al tobillo de la casa italiana de moda Emporio Armani dieron más de qué hablar que el atuendo de la misma novia.
El sombrero de copa que acompañó su look reemplazó los tradicionales tocados que varías de las asistentes al enlace.
La supermodelo eligió un maquillaje bastante natural y minimalista con un suave 'smokey eye'
Los zapatos negros de Casadei que medían diez centímetros fueron la elección ideal para resaltar su figura estilizada.
Aunque este estilo está muy lejos de lo establecido en la etiqueta real para las invitadas a los matrimonios de la monarquía, nadie puede decir que la decisión de Delevigne no fue un acierto.
En medio de muchas celebridades y personajes de la realeza, Cara Delevigne fue el centro de todas las miradas.
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