En muchas ocasiones los artistas no han sido valorados, sino hasta después de su muerte, un caso que no es ajeno al de Vicent Van Gogh. Hoy, sus obras se conservan en los museos más importantes del mundo, el MoMa de Nueva York, la National Gallery de Londres, el Musée d’Orsay de París, entre otros.
Debido a la popularidad del artista neerlandés, pocos tienen la oportunidad de observar sus obras de manera presencial en los lugares donde se encuentra. Sin embargo, a partir del 10 de mayo y hasta el 11 de junio, los caleños disfrutarán de la presentación ‘Van Gogh, Immersive art experience’, una propuesta que integra arte y tecnología, se presenta ‘Van Gogh, el sueño inmersivo’, en el Centro Comercial La Estación.
Se trata de una exitosa muestra que recorre el mundo para rendirle homenaje al artista holandés, considerado como uno de los principales exponentes del postimpresionismo. Las personas interesadas en asistir al evento, podrán adquirir sus boletas en la página de Colboletos.
“Con estas experiencias llevamos más de 10 años en Europa con mucho éxito, hay muchos grupos en el mundo que hacen este homenaje a Van Gogh, nosotros iniciamos en Italia, luego con un grupo en Australia y Francia, es un programa que ha gustado en todo el mundo. Y la intención era comunicar de manera moderna el arte contemporáneo, con tecnología actual”, cuenta Stefano Fake, uno de los autores internacionales más exitosos de este nuevo formato expositivo.
Durante la presentación el público caleño podrá disfrutar de más de 60 obras emblemáticas del autor, combinando tecnología de vanguardia con piezas diseñadas a la perfección. Y estará dividido en 9 secciones, entre ellas:
La galería de pinturas y biografía: Un recorrido expositivo por algunas de las obras de Van Gogh (reproducciones de los lienzos en formato largo) acompañadas de paneles explicativos. La Habitación de Van Gogh: Una reproducción real de la habitación del artista inspirada en el famoso lienzo del pintor. El Café - Terraza: Una reproducción real del cuadro ‘Terraza del café de la Place du Forum en Arlés por la noche’.
Habitación flores de sol: Un tributo a las famosas pinturas de girasoles del maestro en clave contemporánea. Habitación noche estrella: Un tributo a la famosa pintura “La noche estrellada” del maestro en clave contemporánea. Taller Infantil: Un espacio laboratorio que contiene todos los materiales necesarios para que los niños puedan experimentar por algunos minutos el ‘ser pintor’.
Uno de los espacios más llamativos de este encuentro es la sección llamada Grandes citas del autor impresas: Son paneles que contienen fragmentos de sus obras acompañadas de frases ilustres del maestro.
“Es como estar en la mente de Van Gogh, porque además de que logras estar dentro de los cuadros, durante unos minutos se reproducen los pensamientos del pintor, los cuales quedaron plasmados en uno de sus diarios, el cual quedó en manos de su hermano Theo, como muchas de sus obras”, cuenta Stefano Fake.
La inmersión es el momento central del recorrido, pero antes de llegar a esta sala, los visitantes pasarán por una galería de arte donde están exhibidas reproducciones de las obras más conocidas de Van Gogh, y después entrarán a un salón donde el holograma del mismo Vincent narrará algunos capítulos de su propia vida. A la salida también podrán adquirir suvenires como afiches, camisetas y objetos alusivos al artista.
“Esta experiencia es mucho más que simplemente poner imágenes así y grandes y poder imaginar la pared con una música que no tiene sentido, sino construir una nosotros decimos storytelling, o sea, una narración bien hecha, bien estudiada, con mucha calidad en todo en la música que utilizas en la de imágenes en mezclar la voz de lo que pensaba él con la imagen es que ves, así que entras en su mundo es como entrar en su cabeza, o sea, es como estar ahí y el mismo Van Gogh te está diciendo yo estoy aquí contigo”, dice Stefano.
Al morir en 1890, a sus 37 años, ignorado por la comunidad artística y en la pobreza, Van Gogh dejó cerca de 800 pinturas, la mayoría de ellas conservadas por su hermano Theo, aunque fue Johanna van Gogh-Bonger, esposa de Theo, quien posterior a la muerte de los hermanos Van Gogh, se encargó de que la obra pictórica de Vincent fuera reconocida.
“Estudiando a Van Gogh te das cuenta que, claro que le interesaban vender, porque no tenía ni para comer, pero le interesaba más ser único, o sea, y escribe eso en sus diarios: “yo sé que podría pintar diferente y vender más, pero yo no quiero porque yo quiero eso yo quiero expresar con el color y la forma algo nuevo, quiero ser algo diferente de todo lo que ha sido antes”, y nos damos cuenta de que él amaba la pintura, que conocía muy bien en la historia del arte”, expone Stefano.
La experiencia inmersiva ha tenido gran acogida por parte del público del mundo, y algunos podrían pensar que esto puede llevar a crear el desinterés por el arte, y por los museos, por el contrario, Stefano considera que este tipo de experiencias ayudan a alimentar el interés por el arte, “imagínate que un niño visita este viaje por la mente de Van Gogh, su interés cada vez va a crecer más, y, por lo tanto, él aprovechará toda oportunidad que tenga para conocer más del arte, especialmente visitando los museos para conocer las obras originales. Por eso, este es un evento familiar”.