En los últimos años, la crisis climática y la pérdida de biodiversidad han impulsado a muchas empresas a asumir una postura de responsabilidad ambiental. En Colombia, Alquería es una de las compañías pioneras en esta transición.
Carlos Enrique Cavelier, coordinador de Sueños de Alquería, compartió una visión en la que el desarrollo empresarial se vincula con el cuidado de la naturaleza y el apoyo a las comunidades rurales. “La preservación del medio ambiente y el desarrollo van de la mano. Trabajar con los campesinos en programas de apoyo técnico y financiero no solo impulsa la productividad, sino que previene prácticas destructivas como la deforestación”, aseguró.
Desde hace años, Alquería permanece activa en departamentos como Meta, Cesar, Antioquia, Santander, Cundinamarca, Valle del Cauca, entre otros, promoviendo proyectos agrícolas sostenibles y ofreciendo créditos para que los campesinos puedan mejorar sus tierras sin necesidad de talar bosques.
Uno de los proyectos más destacados es el proyecto Vaca Madrina, una iniciativa que apoya a los campesinos en la crianza de ganado de manera sostenible. Con este programa, Alquería busca que los productores de leche alcancen un nivel de ingresos suficiente para salir de la pobreza. La empresa ofrece apoyo técnico y créditos a largo plazo para infraestructuras como pozos y cercas vivas, promoviendo así una producción eficiente que protege el entorno.
Cavelier explicó que el objetivo es que los campesinos aumenten su producción “haciendo más con lo mismo”, es decir, optimizando recursos sin expandir sus tierras. Este enfoque desafía el paradigma tradicional en zonas rurales, donde se asocie el crecimiento económico con la expansión territorial y la tala de árboles.
Los beneficios de la sostenibilidad en las fincas
El trabajo de Alquería no solo mejora la productividad de los campesinos, sino que también impacta en el medio ambiente. Al construir pozos y tanques de agua para el ganado, el proyecto Vaca Madrina garantiza un recurso esencial sin necesidad de expandir tierras o recurrir a fuentes insostenibles. A su vez, la construcción de cercas vivas fomenta la biodiversidad en las fincas, creando corredores ecológicos que benefician tanto a los animales como a las plantas locales.
Además, Alquería ha implementado más de 100 biodigestores en fincas de pequeños productores. Los biodigestores generan gas para cocinar, lo que elimina la necesidad de cortar leña y reduce las emisiones contaminantes. Esta tecnología, que beneficia tanto a la economía como a la salud de los campesinos, tiene un propósito doble: evita la tala de árboles y protege a las familias de la inhalación de humo.
La meta a largo plazo de Alquería es expandir esta tecnología a 10.000 productores de leche, proyecto que la empresa espera financiar con el apoyo del Banco Mundial. Al promover alternativas energéticas sostenibles, Alquería no solo protege el entorno, sino que se consolida como una empresa comprometida con el bienestar social y ambiental.
Alquería como empresa B y su rol en la conciencia empresarial
Alquería pertenece al Sistema B, una red de empresas que buscan generar un impacto positivo en sus comunidades y el medio ambiente. Este sistema, que se basa en los principios de la economía consciente, ofrece un marco para que las empresas midan su éxito no solo en términos económicos, sino también en términos sociales y ambientales.
Para Carlos Enrique Cavelier, la consciencia es el elemento clave en esta ecuación. “La consciencia sobre el impacto que generamos en el medio ambiente y en nuestras comunidades es fundamental para lograr cambios reales. Los consumidores, trabajadores y proveedores que eligen trabajar con Alquería lo hacen porque comparten ese propósito”.
Además de sus proyectos de sostenibilidad, Alquería ha desarrollado una robusta política de educación a través de su Fundación Alquería Cavelier. Con programas que abarcan el mejoramiento de la calidad educativa de forma integral, la fundación ha beneficiado a más de 140.000 niños y jóvenes en todo el país.
Uno de los programas más innovadores es Herederos de Tradición, con el que jóvenes de áreas rurales reciben formación como técnicos agropecuarios. Este programa no solo promueve la productividad en el campo, sino que también prepara a los participantes para asumir roles de liderazgo en sus comunidades. Así, se busca que los participantes vean en el campo colombiano un medio de vida, impulsando el relevo generacional
La importancia de los medios y la transparencia en la sostenibilidad
Al abordar la COP16 y otros eventos de biodiversidad, Cavelier destaca el papel fundamental de los medios de comunicación en la rendición de cuentas: “Los medios deben hacer un seguimiento de los compromisos que las empresas han asumido. Esto no solo fomenta la transparencia, sino que también impulsa a las empresas a cumplir con sus promesas”.
La sostenibilidad, según el empresario, debe ser una labor constante, y los medios tienen un rol crucial para que las empresas mantengan su enfoque en la protección del medio ambiente.
Para Cavelier, la sostenibilidad no se limita a un compromiso empresarial; es una práctica integral que debe permear cada aspecto de la empresa y su relación con la sociedad. Alquería cree en la idea de que “la calidad empieza por casa”, y su visión es que una empresa no puede prosperar en un ambiente degradado.
Para las empresas colombianas, el enfoque de Alquería establece un camino hacia una economía más justa y respetuosa del medio ambiente, donde la rentabilidad y la sostenibilidad no son mutuamente excluyentes, sino elementos esenciales para un futuro compartido.