El defensor del Pueblo, Jorge Armando Otálora Gómez, asegura que podría presentarse una tragedia por el sobrecupo.

El defensor del Pueblo, Jorge Armando Otálora Gómez, una vez más manifestó su preocupación ante el riesgo que afrontan los detenidos en las URI y estaciones de Policía del país, donde asegura que podría presentarse una tragedia ante el hacinamiento y las constantes violaciones a los derechos humanos por cuenta del sobrecupo. Lea también: Hacinamiento generó motín y fuga en dos URI de Bogotá. Otálora también indicó que situaciones como la fuga que se presentó en dos URI de Bogotá (Kennedy y Tunjuelito) y los disturbios registrados en la URI del centro de Barranquilla el fin de semana, son un síntoma de lo que podría ocurrir en cualquier momento. El Gobierno Nacional dio a conocer que a partir del 13 de enero, con el apoyo de la Policía Nacional, se tomarán las medidas para garantizar el acceso de fiscales y jueces a sus despachos, a fin de mitigar el impacto del paro en la rama judicial, la Defensoría considera que “ante la vulnerabilidad del sistema es necesario aplicar un plan de contingencia inmediato para liberar cupos y generar traslados hacia algunos centros de reclusión”. El Defensor del Pueblo insiste en la urgencia de encontrar una salida a la 'Operación Reglamento' que desde hace cinco meses adelantan los guardias del Inpec, protesta que impide el ingreso de detenidos a las cárceles, restringe las diligencias de reseña y bloquea la aplicación de medidas como la detención domiciliaria. El más reciente reporte de la Defensoría Delegada para la Política Criminal y Penitenciaria indica que únicamente en Bogotá los índices de hacinamiento en los centros de detención transitoria superan el 200 % en cada caso, siendo el panorama de las Unidades de Reacción Inmediata de la Fiscalía como se describe a continuación: -En Engativá, con capacidad para 35 personas, alberga 84 en las celdas y 34 en los pasillos y unidades móviles. -En Ciudad Bolívar, donde hay cupo para 50, permanecen 152. -En Puente Aranda, cuya capacidad instalada permite 90 personas, cuenta con 298 detenidos. -En Kennedy, donde se presentó la fuga, el cupo es para 50 detenidos, y hasta la semana pasada había 185. -En Usaquén, donde no hay celdas dispuestas, permanecen 75 personas. En cuanto a las estaciones de Policía del país esa entidad asegura que las salas y el personal de la Policía Nacional no están adaptadas ni entrenadas, respectivamente, para atender población carcelaria o penitenciaria. Las cifras dadas por la Defensoría indican que hasta el 14 de diciembre pasado había 3.525 detenidos en dichas instalaciones, de los cuales 1.601 (es decir el 45 %) eran condenados, y 1.924 (el 55 %) sindicados. Sólo en Bogotá, para ese día el reporte era de 685 personas detenidas en las estaciones de Policía de la ciudad, equivalentes al 19 por ciento del total nacional.