En labores de desminado desarrolladas en el primer semestre de 2024, los soldados han descontaminado 60.015 metros cuadrados de la sospecha de minas antipersonal en el territorio vallecaucano, lo que permite a los pobladores utilizar sus tierras para la siembra de cultivos agrícolas o transitar por sus campos, así lo informaron las autoridades a este medio de comunicación.

También los desminadores lograron destruir cuatro artefactos explosivos y descontaminar dos áreas peligrosas, fortaleciendo la seguridad y tranquilidad de los habitantes.

Puntualmente, en el trabajo del municipio de Guadalajara de Buga, los uniformados han intervenido 13 sectores, despejando 73.758 metros cuadrados y destruyendo un artefacto explosivo.

Además, en Pradera, aunque si bien se hizo entrega del municipio gracias a la información suministrada por los habitantes, los desminadores atendieron el riesgo residual en un área peligrosa de 9320 metros cuadrados que fue descontaminada de artefactos que habían sido instalados desde hace algunos años y que no habían explotado.

Adicionalmente, desde la Tercera Brigada del Ejército Nacional informaron que, en medio de las labores de desminado, se llevaron a cabo 37 talleres en la región para educar a más de 2253 personas sobre los riesgos que representan las minas antipersonal, y así fortalecer comportamientos seguros.

En labores de desminado desarrolladas en el primer semestre de 2024, los soldados han descontaminado 60.015 metros cuadrados de la sospecha de minas antipersonal en el territorio vallecaucano. | Foto: Ejército Nacional

Además de las labores directas en materia de desminado humanitario, los soldados sembraron 18.500 árboles de especies como Gualanday, Guayacán Amarillo, Sauce Vela y Chirlobirlo, contribuyendo al mantenimiento ecosistémico en los municipios de Cali, Palmira y Candelaria.

Estas siembras promueven el paso del agua a través de sus raíces profundas, desde la capa freática hasta las zonas superficiales.

Panorama a nivel nacional

De acuerdo al cálculo de Personas en Necesidad (Pin, por sus siglas en Inglés) del año 2024, se proyecta que 607.910 personas habitantes de 146 municipios de Colombia estarán en riesgo de sufrir un accidente por minas antipersonal, municiones sin explotar o artefactos explosivos improvisados en su territorio, de estas, más de 172.000 estarán en riesgo de ver sus medios de vida colapsados, debido a las dificultades para el uso, disfrute y libre tránsito por sus territorios ante la presencia de artefactos explosivos.

La mayor afectación se podría registrar en 22 de los 32 departamentos de Colombia (Antioquia, Arauca, Bolívar, Boyacá, Caquetá, Casanare, Cauca, Cesar, Chocó, Córdoba, Guainía, Guaviare, La Guajira, Meta, Nariño, Norte de Santander, Putumayo, Risaralda, Santander, Tolima, Valle del Cauca, Vaupés y Vichada).

En el año 2022, el 78% del territorio nacional fue declarado libre de minas antipersonal. Sin embargo, el ELN y las disidencias han vuelto a sembrar estos artefactos explosivos.

Recientemente, el caso de Valdemar Ordóñez, concejal de Argelia en el departamento del Cauca, ha vuelto a poner de manifiesto la continua amenaza que representan las minas antipersonal en las zonas afectadas por el conflicto armado. Ordóñez resultó gravemente herido mientras intentaba reconectar el suministro de agua cortado por disidentes armados en una vereda local.

La Defensoría del Pueblo ha emitido 270 alertas tempranas en los primeros meses de 2024, señalando escenarios de riesgo relacionados con la contaminación por minas antipersonal, municiones sin explotar y artefactos explosivos improvisados.