En los últimos minutos las autoridades reportaron la captura y judicialización de cinco presuntos integrantes de la red urbana del Frente José María Becerra del ELN, por ser los presuntos autores del atentado que el pasado 7 de enero dejó 13 policías y un civil heridos en el barrio Villa del Sur de Cali.

Entre los capturados se encuentra Oliver Obando Sinisterra alias ‘Venado’, coordinador de la Red Urbana de este frente del ELN y segundo al mando, cuyo cabecilla principal es ‘Marcos Pacífico’.

Alias ‘Venado’, de acuerdo con las autoridades, cuenta con una trayectoria de cinco años en esa organización y es sindicado de ordenar distintos atentados terroristas, reclutar jóvenes en los barrios marginados de Cali y ha hecho presencia en zona rural de los municipios de El Charco e Iscuandé (Nariño), donde ha sostenido intensas confrontaciones con la subestructura Cordillera del Sur del Clan del Golfo al mando de alias ‘Matamba’.

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En esta operación también fue capturado Elver Platicón Cuero, alias ‘Quiricu’, cabecilla de la red urbana en Cali y con ocho años en el Frente de Guerra Suroccidental del ELN.

De acuerdo con las autoridades alias ‘Quiricu’ hizo parte de los 20 guerrilleros que se desmovilizaron el 29 de abril de 2020 en el departamento del Cauca, pero regresó a sus andanzas criminales, además es considerado como uno de los delincuentes más violentos del ELN y sobre él recaen varios homicidios de personas a las que el ELN señaló como colaboradoras de las autoridades.

Otro de los capturados en esta operación corresponde a Sofía Campaz Caicedo, alias ‘Mabe’, compañera sentimental de ‘Marcos Pacífico’, cabecilla de este frente del ELN.

Esta mujer es sindicada de haber realizado múltiples desplazamientos a zonas complementarias, administrar los dineros provenientes del narcotráfico, secuestros, extorsiones y actividades de minería ilegal y cumplía funciones de proveedora de ese frente en cuanto a material logístico y equipos de comunicaciones.

Los otros capturados corresponden a César Augusto García, alias ‘Chavo’, cabecilla de milicias del ELN en Iscuandé (Nariño), subordinado de alias ‘Quiricu’ y actualmente con su radio de operaciones criminales en Cali; así como la de Hernán Pertiara Málaga, alias ‘Walter’, explosivista con 26 años de carrera delincuencial, cabecilla de escuadra del Frente Comuneros del Sur, cursos de guerrilla en Ecuador y el departamento del Chocó e instructor en la elaboración, manipulación y lanzamiento de artefactos explosivos.

Bajo lo anterior la Fiscalía los imputó, según su posible nivel de participación, delitos como: terrorismo; concierto para delinquir agravado con fines de homicidio, terrorismo, tráfico de estupefacientes y extorsión y rebelión, y fueron enviados a la cárcel.

"El día de ayer (martes 1 febrero) se logró, mediante un juez de control de garantías, la imposición de medida de aseguramiento en centro carcelario", agregó el Fiscal General de la Nación, Francisco Barbosa, quien además destacó nuevamente el rápido accionar del ente acusador para la resolución de crímenes últimamente.

"Estamos rápidamente, no solamente capturando, sino aplicando todas las medidas de inteligencia, judicial, policial, para poder rápidamente desmantelar esas organizaciones y que los jueces de garantías impongan las medidas de aseguramiento en centro carcelario contra estas personas. No habrá posibilidad de que esas personas estén por encima de la legalidad y del Estado de Derecho en Colombia", aseveró Barbosa.

El presidente Iván Duque dijo en una rueda de prensa que las capturas “son un triunfo de la legalidad, pero también son un mensaje de que el que la hace la paga y de que vamos a seguir desmantelando estas estructuras del Eln y de cualquier otro grupo criminal que opere en nuestro territorio”.

Agregó que estas además evidencian “la participación en actos de terrorismo de personas que se tratan de mimetizar en la población”; sin embargo, “son delincuentes de la peor ralea”.

Por su parte, el ministro de Defensa, Diego Molano, dijo que además del atentado en Cali "algunos de los capturados están vinculados a las investigaciones por el atentado con explosivos a una patrulla de la Policía que dejó cuatro heridos, también a algunos secuestros ocurridos en el departamento del Cauca y a la distribución de panfletos que amedrentaban a la población".