El violento asesinato de un perro en Tuluá, cometido por un soldado profesional del Ejército Nacional, será investigado por el grupo de la Fiscalía General que trabaja delitos relacionados con maltrato animal.
Personal de la Fiscalía ya adelanta la recolección de pruebas sobre el caso que ha desatado gran indignación en Tuluá y el Valle.
Entre las pruebas se encuentra la historia clínica del soldado, y la valoración psiquiátrica realizada por medio de Medicina Legal.
Pero, la fiscal del caso no descarta llevar ante los estrados judiciales al militar para formular la imputación de cargos.
Los hechos ocurrieron el pasado domingo en el lugar de residencia del militar. Las autoridades llegaron hasta la zona y hallaron al hombre fuera de control, mientras su madre se encontraba desmayada.
La primera hipótesis da cuenta que el desmembramiento del animal se registró con arma cortopunzante y a mordiscos.
La diputada del Valle por el partido Alianza Verde, Catherine Morales, pidió a la Fiscalía celeridad a la hora de investigar el maltrato animal ocurrido durante el fin de semana.
"La violencia es intolerable bajo cualquier de sus expresiones y así lo consideramos desde esta curul que le apuesta al respeto por todas las formas de vida, pero es aún más grave cuando esa violencia es ejercida contra seres indefensos".
El relato de la diputada da cuenta que el canino "fue desgarrado por un sujeto con los dientes y las manos. El presunto asesino es miembro activo del Ejército Nacional y se encontraba de permiso".
El perro, de raza pinscher, pertenecía a la madre del hombre, que fue capturado en flagrancia.
"El cuerpo fue encontrado desmembrado, sus partes, debieron ser trasladadas en ocho bolsas plásticas de embalaje, además se notificó que no fueron hallados su órganos sexuales", dice la comunicación de la diputada.
El intendente Wilson Remolina, jefe de la policía Ambiental de Tuluá, narró a El País que el caso se conoció por denuncias ciudadanas que alertaban de una persona "enloquecida" en la vivienda.
“Debido a su alto grado de agresividad esta persona tuvo que ser sometida con una pistola Taser, indicó Remolina.
El caso también provocó medidas en el Ejército. El general Eduardo Zapateiro, comandante del Ejército Nacional, reprochó el caso y dijo que no tolerará casos de maltrato animal entre miembros de la fuerza pública.
"El miembro de la Fuerza, que se encontraba de permiso en Tuluá, Valle, fue capturado por la Policía, y puesto a disposición de las autoridades, quienes determinarán las circunstancias de tiempo, modo y lugar de lo ocurrido, como la responsabilidad individual. Tras el informe sobre lo ocurrido por parte de la unidad, se dio inicio al proceso de acuerdo a la Ley, para el retiro del uniformado de la Institución. Reiteramos nuestra completa disposición con las autoridades competentes para facilitar las investigaciones", escribió el General en Twitter.