Ante un Juez de Control de Garantías, Gabriel Enrique González aceptó que asesino a su hijo de tan solo cinco años de edad en un hotel de Melgar. La Fiscalía le imputó el delito de homicidio agravado.
Según versiones preliminares, González le habría confesado a su expareja el asesinato de su hijo de tan solo cinco años de edad, mediante un mensaje de WhatsApp. “Hora fallecimiento 3:55 am asficcia (sic) mecánica no sufrió. Ahora si puedes disfrutar sola con Edilson y Wesly sin Tricitico ni mucho menos yo. Felicidades”.
Lea además: Bloque 'Alfonso Cano' de las disidencias de las Farc se acogerá al cese del fuego multilateral
El motivo del crimen era vengarse por tener una nueva pareja. “Ahí está claro o el Chunco o Gabriel Esteban. Ud escogió al campesino”, le dice.
Además de estos mensajes escritos, Gabriel Enrique le habría enviado una foto del menor muerto.
El menor había salido con su padre el pasado fin de semana, porque estaban separados y era su turno de compartir con él.
Le puede interesar: Los testimonios de las personas desalojadas de las invasiones de Navarro
Lo recogió en la casa de su madre, entró al baño y luego se lo llevó a una reunión familiar, pero nunca lo llevó de vuelta.
Según versiones preliminares, este le avisó horas después a su exesposa que había dejado una memoria USB en el baño de su casa. En esta le reclamaba por cosas que habían pasado durante la relación y le anunciaba que su hijo moriría.
Con este mensaje, la madre desesperada acudió a las autoridades, pero fue demasiado tarde, tan solo unas horas después Gabriel Enrique le envió el mensaje que confirmó el asesinato de su propio hijo.