Una de las demandas presentadas contra la reforma tributaria del gobierno de Gustavo Petro ha puesto a la Corte Constitucional en un dilema que se puede considerar como inédito o al menos poco usual.

Luego de que la demanda contra el impuesto a bebidas azucaradas, instaurada por la ciudadana Miryam Elfreide Anaya, le correspondió por reparto al magistrado Alejandro Linares, este decidió declararse impedido para decidir sobre el caso porque padece diabetes.

En el documento de dos hojas, Linares relata que padece desde 1977 diabetes mellitus tipo 1 (DM1), de modo que en cualquier pronunciamiento que haga sobre el tema del impuesto a bebidas azucaradas podría llegar a considerarse que hay un conflicto de intereses.

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"Considero pertinente poner a consideración de la Sala Plena la antedicha situación para que determine, de acuerdo con su competencia, si el impedimento acá presentado resulta fundado, en tanto la circunstancia precedente podría enmarcarse en la causal de 'tener interés en la decisión'", explicó el magistrado a sus compañeros de corporación.

Ahora, los demás magistrados de la Corte deberán determinar si padecer la enfermedad, en la que se recomienda no consumir azúcar, es motivo suficiente para que el magistrado se declare impedido de conocer el caso.

La reforma tributaria aprobada en el Congreso dejó en firme que las bebidas azucaradas tengan un impuesto que va aumentando según la cantidad de azúcar que tengan incluida.