Una conducta antisocial, además de un interés económico premeditado, son algunas de las características que identificó el psiquiatra forense e investigador judicial de homicidas seriales, Óscar Díaz Beltrán, en el perfil criminal de Juan Valderrama, principal sospechoso del crimen de la chilena Ilse Amory Ojeda González.
“Si analizamos la situación desde el inicio identificamos que en él no existía un interés amoroso, sino económico. El que ella viniera aquí, aún sin conocerlo bien, era una idea completamente fantasiosa alimentada por las expectativas que él le daba”, explicó Díaz, al indicar que “al Ojeda darse cuenta de los verdaderos intereses de Valderrama, arruinó sus planes”.
Y agregó: “Obedece a las características de una persona con conductas antisociales, que convence con facilidad y tranquilidad, tal y como hablaba en medios, incluso, después de ser capturado. Él buscaba un fin y al no obtenerlo simplemente lo desecha, no hay remordimiento, ni dolor. Cabe resaltar que estas conductas son conscientes y no son justificables”.
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Asimsimo, Díaz afirmó que "no se puede inferir en la posibilidad de que este hombre haya matado antes, pero sí se podría hablar de otro tipo de conductas delictivas donde pudo haber estafado o haber hecho daño a alguien”.
Además, agregó el psiquiatra forense, "el que Valderrama buscara relacionarse con mujeres extrajeras denota la necesidad de que no lo conocieran a profundidad, es decir, personas que van a creer solo la información que él proporciona”.
Valderrama, el hijo de padres separados
Juan Valderrama es un joven santandereano de 28 años. Inicialmente se creía que era oriundo de Curití, Santander. Sin embargo, una persona allegada a esta persona reveló que en realidad nació en Puerto Parra.
“Lo que pasa es que sus papás son separados, entonces pasaba un tiempo en Curití, municipio en el que su papá, un pensionado de la Policía, tiene una finca, y en Puerto Parra, donde su mamá trabaja como docente. Ya después se vino a terminar el bachillerato y vivió en Piedecuesta, con una tía”, reveló el allegado, quien pidió la reserva de su identidad.
Terminados sus estudios, Valderrama ingresó a la Policía Nacional, en donde formó parte del Grupo de Operaciones Especiales, Goes. Se desconocen los motivos por los que fue separado de la institución, la cual integró durante cerca de cinco años.
“Al tiempo que estuvo en la Policía tenía una novia con la que montó un negocio en Puerto Parra. Ellos se dejaron, el negocio se acabó, luego lo retiraron de la Policía y ahí fue que se fue a vivir a Chile”, agregó la persona allegada.
¿Persona Inimputable?
La defensa de Juan Valderrama dijo ayer que buscará que su cliente sea declarado inimputable, con el objetivo de que no sea condenado por el delito de feminicidio.
Inimputable quiere decir que no puede comprender la ilicitud de la conducta o, comprendiéndola, no puede adecuarse a lo que prescribe el derecho. Y de ser así podría no ir a prisión, sino tener otro tipo de condena.
Al respecto, el Fiscal 174 de Feminicidios de la ciudad de Cali explicó que esta figura es una estrategia de la defensa, que se hace con el fin de poder justificar la muerte de la ciudadana chilena.
“Ese concepto lo tiene que dar Medicina Legal previo a una valoración. Pero en este caso todas las pruebas apuntan a que esta persona estaba consciente de lo que hacía, el hecho de responder las preguntas de las autoridades sobre el caso, de haber tenido una relación con la mujer, entre otros detalles, muestran que él la instrumentalizó y sabía de ello”, dijo.