En una entrevista laboral es clave dar una buena impresión y, si bien es cierto que las habilidades, experiencias y conocimientos del aspirante son elementos fundamentales al momento de la contratación, la apariencia personal también lo es.
Traje o blazer: Un traje bien ajustado o un blazer elegante es esencial para la mayoría de las entrevistas formales. Se debe optar por colores neutros como negro, gris o azul marino, que transmiten seriedad y profesionalismo.
Camisa o blusa: Una camisa de vestir o una blusa elegante, preferiblemente en colores claros y sin estampados llamativos, es una excelente opción. Hay que asegurarse de que esté bien planchada y en buen estado.
Pantalones de vestir o falda: Los pantalones de vestir clásicos o una falda a la altura de la rodilla son apropiados para una entrevista. Evite los jeans o las faldas demasiado cortas.
Zapatos formales: Elija zapatos de vestir cerrados y limpios. Para los hombres, unos zapatos de cuero clásicos son una buena opción, mientras que para las mujeres, unos zapatos de tacón moderado pueden funcionar bien.
Accesorios discretos: Los accesorios deben ser sencillos y no llamar demasiado la atención. Un reloj clásico, una corbata sobria, unos aretes pequeños o un collar delicado son suficientes. Evite el exceso de joyería y los accesorios demasiado llamativos.
Consejos básicos para una entrevista de trabajo
Conseguir trabajo no es fácil. Esta tarea, según los expertos, debe ser tomada tan en serio como un trabajo mismo. Lograr esta meta exige compromiso, dedicación y, sobre todo, constancia, ya que dar con una vacante acorde a las capacidades de cada uno no es tan sencillo como parece.
Estos son algunas consejos básicos para una entrevista:
1. Entender bien el perfil que busca la oferta y tener claro las capacidades que se pueden aportar desde lo profesional.
2. Conocer a fondo las habilidades, fortalezas y debilidades de sí mismo, según las perspectivas de la empresa.
3. Tener claro y apuntar las capacidades y aspectos de la vida personal y laboral a resaltar.
4. Practicar con alguien de confianza y apuntar a cualquier serie de preguntas atípicas que se puedan presentar durante la entrevista.