Luego de la operación a la que fue sometido este miércoles el papa Francisco, en Roma, debido a una hernia abdominal, su cirujano habló ante los medios de comunicación.

El doctor Sergio Alfieri, jefe de la unidad de cirugía digestiva compleja del hospital Gemelli de Roma, dijo que esta operación “benigna” no dejará secuelas en el papa y que este no padece otras patologías.

Sobre la cirugía, se conoce que duró tras horas y tuvo la presencia de una docena de médicos. En el procedimiento le hicieron una laparotomía (incisión del abdomen) y le colocaron una prótesis.

El papa Francisco fue operado en el hospital Gemelli de Roma.

“La operación, concertada en los últimos días por el equipo médico que asiste al santo padre, se hizo necesaria debido a una eventración incarcerada que le está provocando síndromes suboclusivos recurrentes, dolorosos y que empeoran”, dice en un comunicado Matteo Bruni, director del servicio de prensa de la Santa Sede.

El papa permanecerá hospitalizado por “varios días”, por lo que sus audiencias fueron anuladas hasta el 18 de junio “por precaución”.

“El papa está alerta y consciente y agradece los numerosos mensajes de proximidad y de ruego que le han llegado”, declaró Alfieri, que ya operó al sumo pontífice en 2021.

Sergio Alfieri dijo que el papa Francisco fue operado sin complicaciones. | Foto: AFP or licensors

El papa Francisco “reaccionó bien tanto a la operación como a la anestesia” y “bromeó conmigo”, añadió.

El sumo pontífice permanecerá en la décima planta del hospital Gemelli, en la misma habitación utilizada por el papa Juan Pablo II, operado en varias ocasiones en ese centro médico.

Hay que mencionar que el papa Francisco padece de dolores crónicos de rodilla, los cuales lo obligan a desplazarse en silla de ruedas o con ayuda de un bastón.

Las dolencias del papa

En julio de 2021, el obispo de Roma estuvo ingresado unos diez días en ese mismo hospital para someterse a una operación del colon, en la que se le extirpó una parte del mismo. Según dijo, sufrió “secuelas” de la anestesia.

A fines de marzo, Francisco, elegido papa en 2013, tuvo de nuevo que ser ingresado en el hospital Gemelli por una infección respiratoria que requirió antibióticos.

El papa Francisco es evaluado constantemente por un robusto equipo médico.

Francisco dijo hace dos semanas en una entrevista con la televisión hispanohablante Telemundo que esta “neumonía” fue tratada “a tiempo”, y que si se hubiera esperado más tiempo, podría haber sido más grave.

El papa es seguido de forma permanente por un equipo médico, tanto en el Vaticano como durante sus visitas al extranjero. Este dispositivo se hace necesario porque tiene a sus espaldas un pesado historial clínico, ya que con 21 años sufrió una pleuresía, una afección grave que le supuso la ablación parcial de un pulmón.

Rumores de renuncia

La salud del santo padre ha alimentado regularmente las especulaciones sobre una posible renuncia. En varias ocasiones dijo que se plantearía dimitir -como hizo su predecesor Benedicto XVI, fallecido el 31 de diciembre- si su salud así lo obligara, pero recientemente señaló que tal escenario no era de actualidad.

Pese a todos estos percances en su salud, Francisco mantiene su programa de viajes. A inicios de agosto tiene previsto visitar Lisboa con motivo de las Jornadas Mundiales de la Juventud, y en septiembre tiene agendados sendos viajes a Mongolia y Marsella, en el sur de Francia.

El papa es seguido de forma permanente por un equipo médico, tanto en el Vaticano como durante sus visitas al extranjero.

Un dispositivo necesario, máxime cuando tiene a sus espaldas un pesado historial clínico, ya que con 21 años sufrió una pleuresía, una afección grave que le supuso la ablación parcial de un pulmón.

*Con información de AFP.