Por AFP
Al menos seis personas murieron y otras 10 resultaron heridas la madrugada de este domingo, 24 de noviembre, en un ataque armado en un bar de la ciudad de Villahermosa, capital del estado mexicano de Tabasco (sureste), informaron autoridades locales.
“Personas armadas” entraron al bar “buscando una persona determinada” y los disparos alcanzaron a quienes estaban cerca, afirmó en conferencia de prensa el vicefiscal del estado, Gilberto Melquiades, quien dijo que se están investigando las causas del ataque.
El funcionario dijo que cinco personas fueron encontradas fallecidas en el lugar, denominado “DBar”, y que otra más murió luego de ser trasladada al hospital. Cinco de los heridos ya fueron identificados, añadió.
La balacera ocurrió dos semanas después de un ataque similar en la ciudad de Querétaro, una región del centro de México que hasta ahora se había librado de la violencia ligada al crimen organizado.
El ataque en Querétaro dejó 10 muertos y siete heridos.
El secretario de Seguridad Pública federal, Omar García Harfuch, dijo el domingo que el gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum “se encuentra en coordinación” con las autoridades locales para aclarar lo ocurrido en Tabasco.
Este estado del sureste de México dedicado a la producción petrolera ha registrado en los últimos meses un aumento en la violencia.
El pasado 20 de noviembre policías locales fueron atacados a balazos durante un patrullaje en Villahermosa.
Entre enero y octubre de este año hubo 715 asesinatos en Tabasco, frente a los 253 que se registraron en todo 2023, según estadísticas oficiales.
Reforma
México está en proceso de ampliar la lista de los delitos por los cuales una persona puede permanecer presa sin sentencia, esto ante el crecimiento de la violencia en el país.
La Cámara de Diputados incluyó la extorsión, el contrabando y el tráfico de fentanilo en la lista de cargos que ameritan prisión preventiva de oficio, una figura por la que muchos mexicanos estuvieron detenidos más de una década sin ser condenados. La legislación actual establece que esa medida no debe extenderse más de dos años.
Esa reforma constitucional aún debe ser aprobada por el Senado, pero ha generado muchas críticas.
México registró el año pasado una tasa de homicidios de 23,3 por cada 100.000 habitantes, especialmente por la violencia del crimen organizado, según Insight Crime, mientras oenegés reportan índices de impunidad por encima de 90%.