Agencia AFP
Israel sigue este domingo, 14 de enero, bombardeando la Franja de Gaza, donde la guerra contra el movimiento palestino Hamás cumple 100 días, sumiendo a la población en una grave crisis humanitaria y haciendo temer un conflicto a escala regional.
“Nadie nos detendrá, ni La Haya, ni el ‘Eje del Mal’, ni nadie”, dijo el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu el sábado, en referencia a las acusaciones de genocidio ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ), con sede en La Haya, llevadas por Sudáfrica.
Israel también se enfrenta en su frontera norte a ataques del movimiento islamista libanés Hezbolá, que forma parte del “eje de la resistencia” de Irán e incluye grupos armados hostiles a Israel y a Estados Unidos.
La guerra estalló el 7 de octubre por el ataque de milicianos de Hamás en suelo israelí desde la Franja de Gaza, que mataron a unas 1.140 personas, en su mayoría civiles, según un recuento de la AFP en base a datos israelíes.
Unas 250 personas fueron tomadas como rehenes durante el ataque, según las autoridades israelíes.
En represalia por el ataque, Israel prometió “aniquilar” a Hamás, en el poder en Gaza desde 2007 y considerado como grupo terrorista por Israel, Estados Unidos y la Unión Europea.
Los constantes bombardeos y la ofensiva terrestre han matado al menos a 23.968 personas, principalmente mujeres, adolescentes y niños, según el último balance del Ministerio de Salud de Hamás.
En el frente diplomático, los ministros de Exteriores de China y Egipto, reunidos en El Cairo, pidieron este domingo un alto el fuego y la creación de un “Estado palestino independiente y soberano en las fronteras de 1967 con Jerusalén Este como capital”.
Muerte y destrucción
El domingo 14 de enero se vieron de nuevo espesas nubes de humo sobre las ciudades de Rafah y Jan Yunis, en el sur de la Franja, indicó un periodista de la AFP.
Según la Oficina de Medios del Gobierno de Hamás, más de 100 personas murieron en los bombardeos nocturnos israelíes en todo el territorio, en particular en Jan Yunis.
Las Brigadas Al Qasam, el brazo armado de Hamás, afirmaron haber destruido un tanque israelí, y hablaron de combates en Al Maghazi, Deir Al Balah y Jan Yunis.
El Ejército israelí dice estar concentrado sus operaciones contra Hamás en Jan Yunis, en el sur de la Franja, donde están congregados cientos de miles de civiles que huyeron de los bombardeos masivos en el norte al comienzo de la guerra, y anunció también la muerte de un soldado, lo que lleva a 188 el número de soldados fallecidos desde el inicio de las operaciones terrestres en Gaza, el 27 de octubre.
El bloqueo israelí de la Franja, reforzado por la guerra, está provocando una grave escasez de alimentos y combustible.
“La muerte masiva, la destrucción, los desplazamientos, el hambre, las pérdidas y el dolor de cien días de guerra en Gaza manchan nuestra humanidad común”, dijo el director de la agencia de refugiados palestinos de la ONU (UNRWA), Philippe Lazzarini, en una visita al territorio.
La lluvia y el frío complican la vida diaria de las familias, que viven acampadas en un patio del complejo médico Al Naser, en Jan Yunis.
La ONU estima que 1,9 millones de personas, o casi el 85 % de la población, han tenido que abandonar sus hogares.
Muchos buscan refugio en el sur del territorio aunque el Ministerio de Salud de Gaza ha advertido repetidas veces que no hay infraestructuras para acomodarlos.
Fuera de Gaza, los ataques de Estados Unidos contra los rebeldes hutíes de Yemen, respaldados por Irán, hacen temer la extensión regional del conflicto.
Los hutíes están aumentando los ataques en el Mar Rojo contra barcos que consideran vinculados a Israel, a lo que Washington respondió con ataques a instalaciones rebeldes en Yemen.
En la frontera de Israel con Líbano, los intercambios de disparos entre Hezbolá y las fuerzas israelíes son casi diarios desde el 7 de octubre. Y en Cisjordania ocupada, donde la violencia ha ido en aumento desde entonces, el ejército israelí informó del arresto por “incitación al terrorismo” de dos hermanas del número dos de Hamás, Saleh Al Aruri, que murió el 2 de enero en Líbano en un ataque con drones.