México es un país con una historia sísmica rica y compleja debido a su ubicación en la intersección de cinco placas tectónicas principales: la Placa de Cocos, la Placa del Pacífico, la Placa del Caribe, la Placa de Norteamérica y la Placa de Rivera. Estas placas están en constante movimiento y la fricción entre ellas da lugar a una intensa actividad sísmica.

El último sismo registrado en México el 3 de agosto tuvo una magnitud de 4.1 en la escala de Richter y su epicentro se localizó a 299 km al Suroeste de Puerto Vallarta, en Jalisco. Las autoridades locales informaron que el temblor se sintió en varias ciudades cercanas.

Aunque no se han reportado víctimas mortales, las autoridades están evaluando los posibles daños en infraestructuras y propiedades. La población fue alertada sobre la posibilidad de réplicas y se instó a estar preparados para cualquier contingencia.

Reporte oficial del último temblor que se presentó en México. | Foto: El País

¿Qué hacer cuando tiembla?

Es importante resaltar que los sismos son fenómenos naturales inevitables, pero la preparación y la conciencia pública pueden marcar la diferencia entre una tragedia y una situación controlada. Las autoridades y la población en general deben trabajar juntas para implementar medidas preventivas, planes de emergencia y sistemas de alerta temprana que reduzcan el impacto de los sismos en la vida de las personas y la infraestructura del país.

  • Alejarse de ventanas y objetos que puedan caer: Si se encuentran en un edificio, es importante alejarse rápidamente de ventanas y objetos que puedan caer o desprenderse, como vidrios, espejos, lámparas y muebles pesados.
Cuando ocurren temblores es común que se presenten caídas de objetos pequeños, pero también de grandes estructuras. | Foto: Twitter: @HalconSv27
  • Protegerse bajo una estructura sólida: Se debe buscar refugio debajo de una mesa resistente u otro objeto sólido que brinde protección contra posibles objetos que caigan.
  • Evitar usar los elevadores: Si están en un edificio, es mejor evitar utilizar los elevadores durante el sismo. Es preferible utilizar las escaleras, ya que los ascensores podrían quedar atascados.
  • No correr enérgicamente: Durante el sismo, no se debe correr enérgicamente, ya que se podría perder el equilibrio y caer. Es mejor mantener la estabilidad y desplazarse con precaución hacia un lugar seguro.
  • No refugiarse en marquesinas ni bajo postes eléctricos: Se debe evitar resguardarse debajo de marquesinas, postes eléctricos u otras estructuras que puedan colapsar.
  • Apagar el gas y la electricidad: Si es posible, cortar el suministro de gas y la electricidad en el hogar o lugar de trabajo para prevenir posibles incendios o fugas.
  • No encender fósforos ni encendedores: Es importante evitar encender fósforos, velas o encendedores durante el sismo, ya que podría haber fugas de gas.
  • Escuchar las indicaciones oficiales: Es esencial prestar atención a las indicaciones de las autoridades locales y seguir las recomendaciones de protección civil para garantizar la seguridad de todos.
Es importante estar preparado y acordar con todas las personas del hogar un punto de encuentro. | Foto: Getty Images

¿Por qué tiembla tanto en México?

Gran parte del territorio mexicano se encuentra en la zona de subducción donde la Placa de Cocos se sumerge por debajo de la Placa de Norteamérica. Esta subducción es la principal causa de los sismos más poderosos y devastadores que ocurren en el país. La liberación repentina de la energía acumulada en las zonas de subducción produce los terremotos, algunos de los cuales pueden tener efectos devastadores en áreas densamente pobladas.

Además de la subducción, también existen fallas geológicas importantes que atraviesan el país, como la famosa Falla de San Andrés y la Falla de Guerrero, entre otras. Estas fallas son zonas de debilidad en la corteza terrestre y pueden generar sismos cuando las rocas se desplazan a lo largo de ellas.

La combinación de la subducción y las fallas geológicas hacen que México sea una de las regiones más sísmicas del mundo. La actividad sísmica es constante y la población debe estar preparada para enfrentar los desafíos que representan los sismos en su vida diaria.

*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de El País.