Un hombre quemó varias páginas de un ejemplar del Corán ante la mayor mezquita de Estocolmo en una protesta autorizada por la policía sueca el miércoles, primer día de la fiesta musulmana del Eid al Ada.

El evento se desarrolló sin incidentes y bajo vigilancia de la policía, constataron los periodistas.

Ejemplares del Corán sobre una mesa durante una rueda de prensa de líderes religiosos en la mezquita Baitul Futuh al suroeste de Londres, Reino Unido. La comunidad musulmana del sur de Londres se concentró en la mezquita más grande de la europa occidental para protestar contra la amenaza de un pastor evangélico estadounidense de quemar ejemplares del Corán con motivo de la conmemoración del 9 aniversario de los atentados terroristas en Nueva York del 11 de septiembre de 2001.

Horas antes, la policía sueca informó que autorizaba esta protesta en la que Salwan Momika ya había advertido que planeaba quemar un Corán.

“La policía autoriza la reunión” debido a que “los riesgos de seguridad” ligados a la quema “no son tales como para prohibirla”, señaló en su decisión.

Pero en la tarde, anunció que presentará una demanda contra el organizador, por incitación al odio.

“Es una locura, es una locura total, solo hay odio detrás de los términos de democracia y libertad”, reaccionó Noa Omran, artista de 32 años, en alusión a los conceptos que hizo valer el organizador.

En enero, la quema de un Corán frente a la embajada turca en Estocolmo desencadenó semanas de protestas y llamamientos al boicot de productos suecos. El episodio también dilató aún más el proceso de adhesión de Suecia a la OTAN, que Turquía bloquea.

Rasmus Paludan fuera de la Embajada de Turquía en Estocolmo, quemando una copia del Corán. | Foto: REUTERS

En la demanda de permiso de manifestación de este miércoles, el organizador dijo querer “expresar (su) opinión sobre el Corán”.

“Voy a destrozar el Corán y a quemarlo”, escribió.

La policía prohibió dos protestas similares el 6 y 9 de febrero aduciendo que suponían riesgos para el orden público.

Los manifestantes recurrieron la decisión y un tribunal administrativo les dio la razón a principios de abril. A mediados de junio, una corte de apelación confirmó la sentencia en primera instancia.

Protestas en el consulado de Suecia, en Estambul, en Turquía, en respuesta a la quema del Corán | Foto: REUTERS

Sobre la base de esos dictámenes, la policía autorizó esta última manifestación, a pocos días de la cumbre de la OTAN de Vilna (Lituania) el 11 y 12 de julio, en la que Estocolmo espera avanzar en su proceso de adhesión a la Alianza Atlántica.

Según la policía, la destrucción de ejemplares del Corán en hogueras es un fenómeno en aumento en el país, lo que ha convertido a Suecia en “un objetivo prioritario para los atentados”.

Crítica de Turquía

El ministro turco de Relaciones Exteriores, Hakan Frida, denunció en Twitter un acto “vil” y “despreciable”. “Es inaceptable permitir estas acciones antiislámicas bajo pretexto de libertad de expresión”, agregó.

Estados Unidos se unió a las críticas. “Siempre dijimos que quemar textos religiosos es una falta de respeto y puede hacer daño”, declaró el portavoz adjunto del departamento de Estado, Vedant Patel.

Según un artículo del diario sueco Aftonbladet del 5 de abril, Momika aseguró que su intención con esta petición no era dificultar la adhesión sueca a la Alianza atlántica.

Un hombre yemení lee El Corán en la mezquita durante el primer día del mes del Ramadan, en Saná, Yemen. Los musulmanes yemeníes empiezan el mes del Ramadan, el noveno mes en el calendario islámico, que implica ayuno hasta que cae la tarde.

“No quiero perjudicar al país que me acogió y preservó mi dignidad”, afirmó, pidiendo que el Corán sea prohibido en Suecia.

Turquía bloquea la candidatura de Suecia en la OTAN, que requiere autorización unánime de los miembros de la Alianza, pues considera que Suecia no actúa contra los grupos kurdos instalados en el país nórdico, a los que considera como “terroristas”.

Además de Turquía, Marruecos también denunció un acto “ofensivo e irresponsable” y convocó a su embajador en el país escandinavo, según un comunicado del ministerio de Relaciones Exteriores.

Con información de AFP