El jefe del grupo paramilitar Wagner afirmó que él y sus 25.000 hombres están “listos para morir” para “liberar al pueblo ruso” del mando militar de Moscú, contra el cual se declaró en rebelión.
“Todos nosotros estamos listos para morir. Todos los 25.000 y luego otros 25.000″, afirmó Yevgueni Prigozhin en un nuevo mensaje de audio por Telegram. “Estamos muriendo por el pueblo ruso, que debe ser liberado de quienes bombardean a la población civil”.
Mientras daba esas declaraciones, el alcalde de Moscú, Serguéi Sobianin, anunció este sábado que “medidas antiterroristas” fueron adoptadas en la capital luego de que jefe del grupo paramilitar Wagner se rebeló contra el mando militar ruso.
“En relación con la información que llega de Moscú, medidas antiterroristas dirigidas a fortalecer la seguridad están siendo tomadas”, declaró Sobianin en redes sociales.
Líder del grupo mercenario Wagner confirma que su ejército cruzó la frontera de Rusia
El viernes inició una investigación penal por parte del Servicio Federal de Rusia contra Yevgeni Prigozhin, líder del grupo mercenario Wagner, bajo cargos de incitación a la rebelión armada. Esta acción se llevó a cabo después de que Prigozhin acusara al Ministerio de Defensa ruso de realizar ataques contra los campos de entrenamiento del grupo paramilitar.
“Las acusaciones difundidas en nombre de Yevgeny Prigozhin no tienen fundamento. En relación con estas declaraciones, el Servicio Federal de Seguridad de Rusia ha abierto un caso penal por el hecho de llamar a una rebelión armada”, informó el Comité Nacional Antiterrorista, según recogió la agencia de noticias TASS.
El jefe del grupo paramilitar, quien llamó a una rebelión armada contra el mando militar ruso, afirmó este sábado (hora local rusa) que sus fuerzas derribaron un helicóptero militar ruso.
“Un helicóptero acaba de abrir fuego contra una columna civil. Ha sido derribado por unidades de Wagner”, afirmó Yevgueni Prigozhin en un nuevo mensaje de audio.
Previamente, Prigozhin había dicho que sus unidades ingresaron al sur de Rusia por la región de Rostov.
Prigozhin acusó al jefe del estado mayor ruso, general Valery Gerasimov, de ordenar ataques contra sus unidades pese a que circulaban entre vehículos civiles.
Ante la situación, el gobernador de la región rusa de Rostov, que limita con Ucrania, instó a la población a quedarse en sus hogares debido a la insurgencia del grupo armado.
“Las fuerzas del orden toman todas las medidas necesarias para garantizar la seguridad de los habitantes de la región. Pido a todos guardar la calma y no salir de casa salvo por necesidad”, escribió en Telegram el gobernador Vasili Golubev.
Las acusaciones del líder de Wagner que niega Moscú
El líder del grupo paramilitar Wagner, clave en la ofensiva militar rusa en Ucrania, acusó este viernes al Ejército regular de Moscú de bombardear sus instalaciones y llamó a la población a rebelarse contra el mando militar.
El Ejército negó estas acusaciones y las consideró una “provocación”, mientras que los servicios de seguridad rusos abrieron una investigación contra el líder del grupo paramilitar, Yevgueni Prigozhin, por intento de amotinamiento.
Sin embargo, Prigozhin afirmó posteriormente que “llegará hasta el final” en su campaña contra el mando militar ruso y aseguró que sus fuerzas habían cruzado la frontera rusa a través de la región sureña de Rostov. Asimismo, manifestó la determinación de “destruir todo lo que se interponga” en su camino.
En respuesta al llamado del líder de Wagner, la agencia de noticias estatal rusa TASS informó que se han reforzado las medidas de seguridad en “instalaciones críticas del gobierno e infraestructura de transporte” en Moscú.
Prigozhin, quien en algún momento fue considerado un aliado cercano del presidente ruso Vladimir Putin, ha ido ganando influencia política y se ha enfrentado a las autoridades políticas y militares, una situación que parece haber superado el ámbito retórico.
Luego de sus críticas, el Servicio de Seguridad de Rusia (FSB) acusó a Prigozhin de hacer un “llamado a iniciar un conflicto civil armado” y solicitó a los combatientes de Wagner que “tomen medidas para detenerlo”.
El fiscal general ruso, Igor Krasnov, informó a Putin que se ha abierto una “investigación penal” contra Prigozhin por “amotinamiento armado”, según el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.