El monitoreo constante a uno de los volcanes activos y de mayor riesgo en todo México, el Popocatépetl, hace que cada que ocurre una erupción esta quede captada en cámara. La más reciente ocurrió en la mañana de este lunes, 14 de agosto, sobre las 8:46 a.m. hora local.
Las imágenes muestran los momentos en que, en cuestión de segundos, una gran oleada piroclástica se extiende cientos de metros hacia el cielo. Pese a que la erupción no fue a gran escala, las autoridades han instado a la población para que no se acerque al perímetro del volcán, mucho menos a la zona del cráter, por el inminente peligro que podría tener ser blanco de fragmentos balísticos o incluso por las altas temperaturas.
Entre los comentarios en el video, destaca uno que señala que cuando el Popocatépetl erupcione de verdad, es decir, que sea un evento de gran magnitud, el distrito federal de Ciudad de México, que se encuentra cercano al volcán, puede sufrir graves consecuencias.
En efecto, el Estado de México y poblaciones vecinas como Morelos y Puebla son algunas de las que mayor riesgo tienen de ser alcanzados por los flujos del volcán en una eventual erupción de grandes proporciones, lo cual podría suceder en los próximos años, según expertos vulcanólogos de ese país.
Durante este domingo 13 de agosto, el Popocatépetl registró la cifra, para nada baja, de 40 exhalaciones. El dato fue entregado por el Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred) junto a la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), por lo que las autoridades federales recomendaron a la ciudadanía estar muy atentos de los canales oficiales y de la actividad misma del volcán.
Aun así, esta no ha sido la cantidad más alta de exhalaciones, ni ha estado cerca de serlo. Solo el pasado 10 de agosto se alcanzaron a registrar 185, y un total de seis días más en lo que va del mes han superado esa cifra.
Lo cierto es que no solo ha permanecido activo durante varios años, sino que ha tenido erupciones y explosiones durante este año. Una de las más recientes fue la del pasado 17 de junio, cuando un gran estallido se sintió en la madrugada mexicana.
De acuerdo con la información entregada por el Cenapred, el Popocatépetl tuvo en ese momento 53 exhalaciones seguidas de vapor de agua, gases volcánicos y ceniza. Asimismo, la actividad impidió la clara visibilidad, aunque se pudo confirmar que cayeron fragmentos en las faldas del volcán.
El estallido ocurrió sobre las 3:37 de la madrugada de aquel día y las versiones apuntan a que ha sido el más fuerte que se ha registrado en este volcán desde que está activo en la actual temporada.
Los datos del Cenapred indican que se sintieron 256 minutos continuos de tremor con amplitud de media a baja. Los tremores son vibraciones volcánicas prolongadas que pueden ser causadas por el movimiento de fluidos al interior de la cavidad de la montaña.
El volcán continúa en un nivel Amarillo Fase II de alarma, de acuerdo con el Semáforo de Alerta Volcánica. Algunos de los escenarios previstos para esta fase son, según el Cenapred:
- Algunas explosiones de tamaño menor a moderado.
- Ocurrencia de tremor de amplitud variable.
- Lluvias de ceniza leves a moderadas en poblaciones circundantes y en algunas ciudades más lejanas.
- Expulsión de fragmentos incandescentes dentro del radio de exclusión de 12 kilómetros.
- Podría esperarse la ocurrencia de lahares que bajen por las cañadas, debido a la acumulación de ceniza en las laderas y su interacción con las lluvias esperadas en las próximas semanas.
- Posibilidad de flujos piroclásticos que no alcancen poblaciones.