Las lluvias intensas que afectan desde hace días a varias regiones de Brasil causaron dos nuevas muertes en el estado de Santa Catarina (sur) y dejaron más de cuatro mil desplazados en Bahia (noreste), informaron este jueves las autoridades.

En Santa Catarina las lluvias trajeron inundaciones y causaron dos muertes: una persona que fue electrocutada y otra enterrada tras un deslizamiento, informó el servicio de Defensa Civil de ese estado.

Un bombero permanecía desaparecido. Imágenes aéreas divulgadas por las autoridades mostraban barrios enteros de Sao Joao Batista, una ciudad del interior, inundados por la creciente. En videos, algunos bomberos aparecían prestando socorro en casas y vías públicas con el agua amarronada a la altura de las caderas.


En la región metropolitana de Florianópolis, capital de Santa Catarina, el agua inundó la planta baja de un centro comercial, según un video publicado por el portal de noticias G1, que mostraba las escaleras mecánicas parcialmente cubiertas por agua.

Hasta el momento, las autoridades de este estado del sur del país reportaron más de mil desplazados.


En el estado de Bahia, noreste de Brasil, las lluvias mantenían bajo emergencia a unos nueve municipios y más de cuatro mil personas fueron desplazadas de sus hogares, según datos de la Defensa Civil.

Un deslizamiento de tierra ocurrido el lunes sobre una carretera en la región montañosa del estado de Paraná (sur) dejó al menos dos muertos. Este jueves, los bomberos continuaban buscando desaparecidos bajo el lodo.

"La estimación de potenciales víctimas fue reducida para menos de 30", informó el gobierno de Paraná, en relación a la estimación previa de los bomberos de que "podría haber entre 30 y 50 desaparecidos".

"Debido al gran volumen de tierra, todavía no es posible detallar con exactitud la cantidad de vehículos y víctimas que pueden estar enterrados", explicó el gobierno este jueves.


Impresionantes imágenes difundidas por los bomberos mostraron una enorme mancha marrón volcada sobre la frondosa vegetación y el camino asfaltado, donde apenas se divisaban los vehículos arrastrados.

Durante el último verano austral, los deslizamientos de tierra provocados por intensas lluvias causaron cientos de víctimas en Brasil.

La peor tragedia ocurrió en febrero pasado, cuando más de 200 personas murieron en Petrópolis, una ciudad turística ubicada en una región montañosa cerca de Rio de Janeiro.