La jueza 41 penal del Circuito de Bogotá, Laura Estella Barrera, encontró mérito para continuar con el llamamiento a juicio en contra del expresidente Álvaro Uribe por el delito de soborno, a pesar de la solicitud de la Fiscalía de que el caso precluyera.
En una audiencia que se prolongó por varias horas, la jueza encontró que había pruebas necesarias para llevar al exsenador y expresidente a juicio por los delitos de soborno de testigos y fraude procesal.
La jueza Barrera tenía la responsabilidad de definir el futuro de la investigación en contra del exsenador, pues mientras las víctimas solicitaban seguir adelante con el juicio, desde la Fiscalía General de la Nación pedían que fuera archivada la investigación.
Aunque la audiencia aún está en curso, la juez Laura Barrera decidió no precluir el primer hecho contra el exmandatario, en el que presuntamente participó en el soborno al testigo Juan Guillermo Monsalve a través del abogado Diego Cadena.
Al respecto, la togada señaló que Javier Cárdenas, fiscal del caso, no hizo un esfuerzo serio de la investigación que se llevaba en curso y en el cual había pruebas testimoniales que acreditaban la presunta comisión del delito de soborno.
Cabe resaltar que son siete hechos jurídicamente relevantes que se llevan en estudio en este caso contra el exmandatario. No obstante, esta primera decisión es un posible camino a la decisión final que se espera sea comunicada por la jueza.
Estas presuntas irregularidades se habrían cometido con ayuda de su abogado Diego Cadena, quien habría ido hasta la cárcel la Picota, en Bogotá, para ofrecerle beneficios como ingresarlo a la JEP y luego amenazar al testigo Monsalve para que se retractara de sus acusaciones en la Corte Suprema de Justicia contra el exmandatario.
Cabe recordar que la Comisión Seccional de Disciplina Judicial del Valle del Cauca suspendió a Diego Cadena por dos años y 10 meses del ejercicio de sus funciones profesionales por su presunta participación en la manipulación de testigos.
Entre tanto, Uribe ya había manifestado que el proceso en su contra tiene una motivación política. “En este proceso no hay una sola evidencia, no hay un solo indicio, una sola inferencia, como dicen ahora los tratadistas del derecho penal, que pueda decir que yo condicionaba la declaración de alguno de los testigos; simplemente pedí la verdad. Imagínese yo pidiéndole mentiras a Juan Carlos Sierra, su condición en los Estados Unidos no le permite mentir, inmediatamente pierde los beneficios que tiene”, dijo el exmandatario de Colombia.
También agregó: “cómo coincide ese interés político, cómo arman las historias judiciales basadas en el interés político de mi persona. Tendré que remitir esta audiencia a lo que está en un documento público sobre lo que dijo el padre De Roux en la Comisión de la Verdad, lo digo con respeto, pero yo no legitimo esa Comisión porque violó el resultado en plebiscito, montaron esa campaña”.