Tras la polémica participación del embajador de Colombia en Nicaragua, León Fredy Muñoz, en una marcha sandinista, el canciller Álvaro Leyva citó al funcionario en Bogotá. A punto de conocer el fallo de la Corte Penal Internacional de La Haya en el caso que mantiene a Colombia en disputa con Nicaragua, el embajador fue señalado de exaltar el régimen de Daniel Ortega.

Según conoció SEMANA, la Cancillería adelanta una investigación de control interno por las actuaciones de Muñoz y tendría que cumplir una cita en Bogotá este martes 11 de julio para responder al Gobierno por los cuestionamientos que lo rodean.

La celebración en la que participó el embajador colombiano fue el pasado 7 de julio por la conmemoración de los 44 años de la revolución sandinista en Nicaragua. Durante la caminata en la ciudad de León, se le vio con trajes alusivos a ese movimiento de izquierda, como la pañoleta roja y negra en el cuello y la gorra del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), partido que lidera el actual presidente de ese país, Daniel Ortega.

“Esto es admirable, lo que yo he sentido desde el 30 de septiembre que llegué a Nicaragua, aquí estoy de embajador. Es un pueblo alegre, bonito, amable y, sobre todo, un pueblo que está convencido de su revolución”, dijo el embajador Muñoz en un video que desató toda una tormenta política. “La verdad estoy gratamente sorprendido y hoy lo ratifico aquí en esta celebración, esta conmemoración de este 7 de julio es una cosa maravillosa”, agregó.

León Fredy Muñoz Lopera es un político colombiano licenciado en educación. Se desempeña como embajador de Colombia en Nicaragua. | Foto: Colprensa

La celebración del embajador colombiano de la revolución sandinista en ese país no solo generó controversia en Colombia, sino también en el panorama internacional. “Ojo. El embajador de Colombia en Nicaragua estaba celebrando los crímenes de Daniel Ortega en la Caminata 44/19. El Artículo 41 de la Convención de Viena señala que los diplomáticos no deben ‘inmiscuirse en los asuntos internos de un Estado’ y mucho menos en temas políticos”, dijo el exembajador de Nicaragua ante la OEA, Arturo McFields Yescas.

El senador de los Estados Unidos Marco Rubio lanzó una dura crítica en contra de Muñoz y calificó como “inconcebible que el embajador del Gobierno Petro aplauda una revolución marxista y sangrienta”. “Es un grave insulto a todos los nicaragüenses y exiliados que aún sufren las repercusiones de los sandinistas”, señaló el legislador.

El mandatario nicaragüense ha manifestado en varias ocasiones que es una exigencia que Colombia acate el fallo de La Haya.

Uno de los detonantes de la polémica es que el próximo jueves 13 de julio se conocerá el fallo de la Corte Penal Internacional (CPI) de La Haya sobre el litigio entre ambos países, por lo que muchos se cuestionan si la asistencia tendría relación con este hecho. Se espera una decisión de fondo del tribunal internacional sobre la plataforma continental extendida en una disputa de años.

¿Qué dice el embajador?

Por las duras críticas recibidas, el embajador colombiano salió a dar explicaciones por medio de un comunicado en el que defendió su “obligación de participar en reuniones o actividades importantes para el Gobierno sandinista”.

“Ante las gestiones propias de la Embajada y los relacionamientos propios del protocolo entre gobiernos, es mi obligación, como embajador, participar en reuniones y/o actividades importantes para el Gobierno sandinista, ya que debo hacer presencia estratégica para cuidar los intereses nacionales de Colombia en Nicaragua. Esto más allá de las estrategias jurídicas en La Haya o en los organismos multilaterales”, señaló.

Incluso, el embajador señaló que la diplomacia debe ser “franca” e hizo un llamado a “simpatizar con el otro”. “El relacionamiento del embajador, con el Gobierno de Nicaragua, debe ser estratégico para poder llevar a cabo la mejor representación de Colombia, la cual tiene que dejar de ser vista únicamente como un símbolo o una figura decorativa. Como lo ha dicho nuestro presidente Gustavo Petro, la diplomacia del Gobierno del cambio debe ser una diplomacia franca, mirando directamente al otro, simpatizando con el otro para lograr los objetivos que como embajador es mi obligación cumplir”, se lee en el comunicado.