El segundo día de citaciones en la Fiscalía por los escándalos derivados de Laura Sarabia, exjefa de gabinete de Gustavo Petro, terminó con un cincuenta-cincuenta: dos de los citados asistieron, dos no se presentaron.
Por un lado, el coronel Carlos Feria, jefe de Casa Militar de Presidencia, cumplió el llamado. Su diligencia tardó cuatro horas. En esta ocasión, debía responder con declaración juramentada qué sabe sobre la muerte del coronel Óscar Dávila, de la que se espera dictamen medicolegal este miércoles 21 de junio.
Así mismo, Feria debe regresar este miércoles para responder en interrogatorio a otro fiscal por el uso aparentemente irregular del polígrafo con la niñera Marelbys Meza. Su abogado, el penalista Marlon Díaz, dijo en medios que se siguieron todos los protocolos para la prueba y que su uso ha sido “satanizado”.
Quien también se acercó al búnker de la Fiscalía fue la subintendente Luisa Calle, quien hacía parte del esquema de seguridad de Laura Sarabia. Su cita era para declarar bajo juramento en una de las líneas de investigación que maneja el ente investigador por el polígrafo. No se conocen detalles de lo que respondió.
En la otra orilla, la de los ausentes, estuvieron el conductor Harold Rondón, de la UNP, que estaba asignado a Sarabia. Por problemas de notificación, su declaración jurada quedó para el 22 de junio, el mismo día en que la exjefa de gabinete acudirá a ampliar detalles de su denuncia por robo de dinero.
El esposo de Laura, Andrés Fernando Parra, tampoco asistió. Se amparó en su derecho a no brindar declaraciones que puedan resultar en contra de su cónyuge.
Este miércoles se espera que, además de Feria, el capitán Elkin Gómez, de la Oficina de Polígrafo de Palacio, y el poligrafista Jhon Sacristán Bohórquez respondan al interrogatorio al que la Fiscalía los convocó.
*Con información de Colprensa.
Habló otra de las empleadas de Laura Sarabia
Su nombre es Fabiola y, como muchas mujeres de este país, fue víctima de la violencia en su departamento, el Valle del Cauca. Huyendo de ese territorio, llegó a Bogotá para conseguir una mejor calidad de vida. Lo que nunca imaginó fue que su sueño de forjarse un mejor futuro se le iba a convertir en pesadilla.
Tiene 50 años de edad y es la extrabajadora doméstica de Laura Sarabia, quien fue apartada del cargo de jefa de Gabinete del presidente Gustavo Petro. Su drama comenzó cuando su teléfono fue chuzado ilegalmente y fue llamada por el alias de La madrina.
Fabiola, quien vive en una zona deprimida de Bogotá, dijo que el mundo se le había venido encima cuando empezó a ver salir su nombre vinculado al robo ocurrido en la casa de Sarabia y cuando crecieron las versiones sobre una supuesta interceptación.
“A mí quién me va a recomendar, quién me va a dar más empleo, soy inocente de todo lo que esa gente dice de mí”, le aseguró la mujer al medio de comunicación.
Todo empezó el 27 de enero de 2023 cuando se enteró de que se había perdido un objeto valioso de la casa de Laura Sarabia. ”Me entero de que se perdió esa plata porque yo voy a trabajar común y corriente”, dijo.
Fabiola también dialogó con la revista Semana, en la que aseguró sentir miedo de lo que le pueda pasar y teme por su seguridad, pues ella sabe muy bien lo que significa estar bajo la mira de los grupos al margen de la ley.
“Antes de hacer una cosa de esas, primero piensen en las personas que van a perjudicar, soy defensora de la Policía, piensen que uno tiene familia por delante, le arrastran la vida a uno, a la familia también, eso le diría yo a la Policía”, aseguró.
Fabiola se defenderá, pues insiste una y otra vez en que ella no es integrante de ninguna organización criminal. Por el contrario, toda su vida ha trabajado de manera honesta y aseguró que demandará las actuaciones de las que fue víctima por parte de la Policía.