El Congreso de la República tiene días decisivos, pues tiene que consolidar las mayorías y, además, tiene que intentar que en un mes estén aprobadas las reformas sociales del gobierno de Gustavo Petro.
Sin embargo, no se alcanzaría aprobar las reformas en este primer semestre, según dijo el presidente de la Cámara de Representantes, David Racero: “Ya con los tiempos no alcanzaríamos las tres reformas y tendríamos que revisar cuánto podemos avanzar en este momento final del semestre”.
“Actos legislativos y leyes orgánicas que no se aprueben en Comisión esta semana se hunden. Esta es la última semana”, añadió el presidente de la Cámara en diálogo con El Tiempo.
El poco tiempo que hay dejaría en vilo las reformas del Gobierno, pues el siguiente semestre ni el Senado ni la Cámara de Representantes estarán en manos del partido Pacto Histórico, ya que pasarán a las presidencias de los partidos de la Alianza Verde y el Partido Liberal, respectivamente.
Cabe recordar que la legislatura del Senado termina el próximo 20 de junio, por lo que tiene tan solo 15 días hábiles. Aunque se citarán horas extras hasta el 30 de junio, queda muy poco tiempo para aprobar todo en este semestre.
De hecho, ya se han perdido días de trabajo en el Congreso, como pasó el pasado jueves de la semana pasada, donde se esperaba que se llevara a cabo en el Senado el séptimo debate del acto legislativo que regula el cannabis de uso adulto. Este debate no se llevó a cabo y quedó para este lunes, 29 de mayo.
Aunque la semana pasada ya se aprobó la polémica reforma de la Salud en la Comisión séptima de la Cámara, esto no se ve igual para las otras reformas.
Por un lado, para la reforma laboral, a la cual su discusión todavía no tiene programada, la bancada del Partido Conservador ya anunció que votará negativo el proyecto, por considerar que el mismo no contribuirá para el aumento de los empleos, sino que por el contrario afectará en al menos 450 mil puestos la entrada en vigencia de dicha reforma si es aprobada por el Congreso de la República.
En tal sentido se pronunció el presidente del partido, senador Efraín Cepeda, quien sostuvo que “el Partido Conservador tomó la decisión de forma unánime en bancada de no acompañar el proyecto de reforma laboral, es decir lo votaremos negativamente ”. Consideran los conservadores que “no sólo no promueve el empleo sino que lo destruye como lo ha expresado el Banco de la República y se pierden 450 mil empleos”.
Incluso el partido desde que fue radicado ese proyecto por parte del gobierno había anunciado que se apartaba de muchas de las propuestas y que sería en una discusión de bancada cuando se analizaría.
Diferente es el panorama que tiene el proyecto de reforma pensional. El mismo está en la Comisión VII del Senado, en donde se espera que su discusión ya se tome esta semana. Se estima que este proyecto se tome al menos unas dos semanas en esa célula legislativa, lo que significa que tan sólo hasta la primera semana de junio tendría su aprobación total.
Luego debe avanzar a la plenaria del Senado, en donde similar a la comisión se tomaría dos semanas en su aprobación, lo que significaría que es con el cierre de las sesiones ordinarias. Su discusión en la Cámara de Representantes el Gobierno esperaría se de en julio, o si hay garantía de que no se hunde, se incluirá en las sesiones extras para así avanzar en su aprobación.