“La sensación que queda después de cada fallo contra Álvaro Uribe es que se trata de una pelea política que terminó en los tribunales, es decir, pusieron la administración de la justicia en favor de intereses políticos”.

Esa es la reflexión que hace el analista político Ancízar Marroquín luego de que, por segunda vez, una jueza negara la preclusión en el caso contra el expresidente, imputado por los presuntos delitos de fraude procesal y soborno a testigos.

El expediente de la audiencia, que aún está en curso, tiene que ver con el presunto soborno al testigo Juan Guillermo Monsalve, en el que supuestamente participó Uribe a través del abogado Diego Cadena, para que el exparamilitar se retractara de haber dicho ante la justicia que el exmandatario tiene nexos con las autodefensas.

Este es uno de los siete hechos jurídicamente relevantes que se estudian en el caso contra el líder natural del Centro Democrático, quien ha negado todas las acusaciones.

Analistas mencionan que el fallo en contra de Álvaro Uribe es importante al ocurrir cerca de las elecciones de octubre. Fotos David Estrada Larrañeta | Foto: David Estrada Larrañeta

“Sin duda es un golpe político para su imagen como gran figura pública de Colombia. Además, el fallo coincide con el bajo perfil que el expresidente ha mantenido durante el Gobierno Petro”, considera, a su vez, el analista político John Mario González.

Para Marroquín, “la decisión judicial tiene un efecto mediático importante al ocurrir cerca de las elecciones de octubre, donde se está jugando el avance regional de los partidos de Gobierno, en especial de aquellos que integran el Pacto Histórico, o si la oposición mantiene su influencia en alcaldías y gobernaciones”.

“Aunque los expertos dicen que Uribe aún tiene muchas opciones e instancias legales para defenderse y evitar ir a juicio, también se dice que, si no el caso no se resuelve este año, para el próximo quien estará al frente de la Fiscalía será el ternado por el presidente Petro, lo que se convierte en un elemento adicional en contra del exmandatario, condición que ratifica el carácter político del proceso”, agrega.

Sin embargo, Laura Barrera, jueza 41 encargada del caso contra Uribe Vélez aseguró que hay pruebas suficientes para mantener la investigación.

“Contrario a lo aseverado por el Fiscal, sí existen elementos materiales, probatorios y de evidencia física que permiten afirmar que la conducta delictiva de soborno a testigos sí existió y Álvaro Uribe podría tener la condición de partícipe”, dijo la jueza.

La jueza 41 de conocimiento de Bogotá negó la preclusión en el caso contra el expresidente, imputado por los presuntos delitos de fraude procesal y soborno a testigos.

Además, explicó que, para darle la preclusión, es necesario declarar lo juzgado a favor del investigado, por lo que debe haber total certeza de que no hay delitos por parte del expresidente.

“La opinión escucha teorías jurídicas a favor y en contra de él, se escucha la deslegitimación y manipulación de testigos de lado y lado y de los cambios de parecer en los testimonios, pero al final nadie tiene una idea clara de lo que ocurrió”, dice el analista Marroquín.

¿Afecta a la oposición?

“El liderazgo político de Álvaro Uribe es un legado que ya no es tan sólido. Pero sin duda el Centro Democrático va a converger en una gran fuerza en Colombia para sacar el país adelante del empantanamiento en que ha caído”, menciona John Mario González.

No obstante, “el mismo proceso judicial que tiene pendiente Uribe es un problema para liderar esa fuerza de oposición. Él va a llegar junto a sus aliados en una convergencia de centro derecha, pero no será el protagonista que fue en el pasado”.

De acuerdo con él, el analista político Marroquín observa que el fallo “afecta la fuerza de la oposición en la composición de listas, en los candidatos y en la sensación de la opinión pública sobre las dudas que despierta el que su máximo líder esté cuestionado”.

Para analistas, las decisiones en el Congreso frente a los proyectos que impulsa el Gobierno, como las reformas a la salud y laboral, podrían verse afectadas porel caso contra el expresidente y líder de la oposición. (Colprensa-Mariano Vimos) | Foto: COLPRENSA ©

“El impacto directo es en la toma de decisiones en las elecciones. Además, de las decisiones en el Congreso frente a los proyectos que impulsa el Gobierno, como las reformas a la salud y laboral. Afecta también las críticas y el control político que pueda hacerle la oposición al Ejecutivo”, añade.

Y continúa: “Nada más efectista que dinamitar a un líder político de una colectividad. Aunque el proceso inició para debilitar al Gobierno, en su momento, hoy se logra con la oposición”.

Los analistas coinciden en que “la investigación afecta mucho la imagen y el aura de caudillo de liderazgo que tuvo el exmandatario”, dice González, aunque asegura que muchos integrantes del Centro Democrático seguirán jugando un papel importante en el fortalecimiento de esa fuerza política en Colombia.

Y añade que “si bien es importante hacer una política sensata y sin polarizaciones, la postura del expresidente durante el Gobierno Petro no ha correspondido a su talante de combatiente político y muchos se preguntan el por qué de ese bajo perfil”.