Volviendo a la posibilidad de convocar una asamblea nacional constituyente, el presidente Gustavo Petro aseguró durante la Jornada de Acciones por la Vida, la Seguridad y la Paz, en Popayán, que adelanta el Gobierno, que el tratado de paz firmado con las antiguas Farc tiene la legitimidad necesaria para impulsar este proceso.
Según dijo ante varias autoridades locales, entre ellos el Alcalde de Popayán y el Gobernador del Cauca, “a través de las altas partes contratantes se podría citar a una asamblea nacional constituyente, tiene esa fuerza”.
“Yo no me quiero reelegir, yo quiero que este acuerdo de paz sea realidad”, indicó el Mandatario Nacional, mientras aseguraba que con esas palabras se disipan las dudas sobre sus intenciones políticas, y se reafirma su intención de enfocarse en los beneficios que el Acuerdo traería para la transformación del país.
“La fuerza de transformar el territorio no es un capricho de Petro o de unas organizaciones populares; es un mandato de la humanidad”, añadió.
Como se sabe, esa ha sido una propuesta de la Casa de Nariño muy criticada desde diferentes sectores que han alertado de la modificación de la Constitución, porque le daría la facultad al Jefe de Estado de reelegirse, posibilidad que Petro ha desmentido en repetidas ocasiones pero no ha dado su brazo a torcer sobre convocar la asamblea.
De hecho, a finales de mayo el Gobierno realizará una asamblea popular de distintas fuerzas vivas que apoyan al Mandatario y que esperan que sus propuestas se hagan realidad.
A principios de este mes, un grupo en cabeza de los congresistas del Pacto Histórico, anunció la convocatoria a una gran reunión de sectores políticos de izquierda, del progresismo, de fuerzas sociales y de sindicatos para el 31 de mayo y el primero de junio, para dar los primeros pasos de lo que esperan sean la gran asamblea nacional del poder constituyente para lograr las reformas sociales y la paz.
Al respecto el representante a la Cámara por el Pacto Histórico, Gabriel Becerra, señaló que “en ejercicio de nuestra autonomía les invitamos a reunirnos el próximo 31 de mayo y primero de junio en Bogotá, a imaginar y construir la nueva etapa de Colombia y nuestro lugar histórico en esta tarea, la más importante en los nuevos tiempos para la democracia en la Nación”.
La convocatoria, dijo, va dirigida en concreto a “a todo el pueblo, territorios, sectores sociales, económicos, políticos, culturales, productivos, populares y comunitarios en Colombia y el exterior, dispuestos a avanzar en la construcción y consolidación de la unidad y el poder constituyente en defensa de la democracia, las reformas sociales y la construcción de la paz”.