Luego de cuatro días de debate a la reforma pensional y con el mínimo de congresistas requeridos para el quórum durante este martes, el Senado de la República aprobó el articulado del proyecto, por lo que ahora la iniciativa para modificar el sistema de pensiones en Colombia pasará a la Cámara de Representantes, último escenario para que sea una realidad.
Ninguna de las proposiciones de los senadores no avaladas y sometidas a votación pasaron el umbral, por lo que el proyecto se quedó como estaba en la ponencia durante este martes, además de incluir solo las proposiciones previamente avaladas y que fueron sumadas a la misma.
Las principales trabas durante la sesión se dieron por dos motivos. En primer lugar, cuando fueron votados los artículos 21 y 25, ya que hubo dificultades para contabilizar los votos debido a que un senador, al parecer, registro su preferencia tanto de forma manual como electrónica, por lo que se denunció que había voto doble.
Los congresistas de oposición alegaron falta de garantías de transparencia y fue necesario que se volviera a definir la suerte de estos dos puntos, que a la postre terminaron siendo avalados.
Asimismo, hubo varios momentos de silencio durante la transmisión del debate debido a que el Gobierno contó, la mayor parte del tiempo, solo con el quórum mínimo requerido para que no se cayera la sesión, que es de 53 senadores. Varias veces se escuchó a la presidenta encargada de la plenaria, María José Pizarro, llamar a varios compañeros para que votaran y se alcanzara el umbral mínimo, ya que, de lo contrario, no se habría podido continuar.
Finalmente, el presidente Gustavo Petro y su gabinete lograron sacar adelante su iniciativa, la cual empezaría a operar a partir del 1 de julio de 2025, por lo que hay poco más de un año de preparación para asumir el cambio en el sistema pensional de los colombianos.
¿Qué viene ahora para el proyecto?
Cabe recordar que la reforma pensional aún no es una realidad, ya que aún falta que la Cámara de Representantes la debata y vote, lo cual tiene que ocurrir en poco tiempo porque el segundo periodo legislativo acaba formalmente el próximo 19 de julio, y para esa fecha ya tiene que haberse surtido el proceso en esa Corporación.
En otras palabras, si la Cámara de Representantes no aprueba los casi 100 artículos de la reforma pensional antes de que termine el periodo, el proyecto se hundirá y el Gobierno tendría que presentarlo nuevamente para el tercer año legislativo, que va desde el 20 de julio de este año hasta el 19 de julio de 2025.
Sin embargo, para tranquilidad del presidente Gustavo Petro y su Gobierno, todo apunta a que el trámite en la Cámara será rápido y menos tedioso que en el Senado, dadas las mayorías que se han alcanzado allí y que le han servido para aprobar proyectos como la reforma a la Salud, que luego fue tumbada por el Senado.
El cronograma indica que después del 12 de mayo arrancará el proceso en esa Corporación en la Comisión Séptima, y el proyecto se tomaría el resto del mes entre conformación de la ponencia, debate y votación.
A inicios de junio tendría que pasar a la plenaria para que se surta el mismo proceso. De este modo, la reforma pensional podría ser aprobada en la Cámara hacia la tercera semana de junio, pero si por diferentes motivos el tiempo no alcanza, el Jefe de Estado aún puede citar a sesiones extras a los representantes, la cual podría extenderse hasta el 19 de julio como mucho. Luego de ver el trámite en el Senado, la Cámara parece tener el tiempo suficiente para dar luz verde a esta reforma del Gobierno Petro.