La reforma a la salud presentada por el Gobierno Nacional y que hace tránsito en la Comisión Séptima de la Cámara de Representantes es lo que podría denominarse un paciente de alta complejidad.

Mientras sus coordinadores ponentes sostienen que se trata de un proyecto “renovado” frente al que se hundió el semestre pasado en la Comisión Séptima del Senado con sus más de 140 artículos, opositores de la Casa de Nariño insisten en señalar que la iniciativa solo fue “maquillada”.

En ese sentido, el representante por el Centro Democrático Andrés Forero sostiene que es una reforma inconveniente para el país, que no resuelve los problemas actuales del sistema de salud y, por el contrario, crea otros.

“Lo que hemos dicho es que básicamente es la reiteración del proyecto que se hundió en el Senado el semestre pasado. El Gobierno Nacional desaprovechó el tiempo que tuvo para buscar consensos y acuerdos con los distintos actores del sistema y, en particular, con los pacientes”, indica.

La reforma a la salud del Gobierno del presidente Gustavo Petro regresó al Congreso. | Foto: Colprensa

Pero además el congresista sostiene que esta iniciativa, de la que en la semana pasada los integrantes de la Comisión Séptima de Cámara ya aprobaron 21 de sus 58 artículos, avanza en la “estatización del sistema de salud colombiano”.

Y agrega: “Realmente creemos que es una transición a un sistema nacional de salud, que es una reforma estructural y no una modificación. Por eso, creemos que debió haber sido tramitado a través de una ley estatutaria”.

Forero anota que, de llegar a aprobarse en el Senado, “aunque esperamos que se hunda porque básicamente es el mismo texto con unos cambios cosméticos que ya se hundió antes”, va a ser una reforma que en su totalidad solo entrará en vigencia en dos años, después de ser sancionada por el presidente Gustavo Petro.

“Por eso, de cara a la situación que vive el país en materia de salud, la verdad, la reforma ha pasado a un segundo plano y le exigimos al Gobierno que, antes de estar planteando estos debates en el Congreso, resuelva los problemas de caja al día de hoy”, insiste el opositor.

Actualmente, el déficit del sistema de salud supera los $ 20 billones.

Para el representante a la Cámara por el Partido de la U Víctor Manuel Salcedo, la reforma a la salud “la están ya haciendo vía decreto”.

Dice que en, un documento de diez puntos que le presentaron al ministro de Salud, Guillermo Jaramillo, le expresaron varias preocupaciones, entre ellas que no estaban claras las funciones de la Administradora de los Recursos del Sistema General de Seguridad Social en Salud, Adres.

Debate de la reforma a la salud en la Comisión Séptima de la Cámara de Representantes. | Foto: Tomada de X @comisionVll

“Presenté diez proposiciones, incluido un artículo nuevo, porque el gran problema de la salud se llama insuficiencia de recursos y por eso hemos propuesto disponer el 1 % del PIB de manera progresiva para llevarlo a la salud”, precisa.

Y señala que si bien el Gobierno Nacional aprobó el traslado de los recursos de los impuestos saludables, estos son insuficientes para cubrir el déficit actual del sistema.

En opinión de Salcedo tampoco hay claridad sobre cómo se va a definir la UPC (Unidad de Pago por Capitación) ni quién va a asumir la responsabilidad de la gestión del riesgo.

“La atención primaria en salud que propone el Gobierno demorará diez años en dar sus frutos. ¿Y los enfermos de atención mediana y de alta complejidad? Estas personas necesitan atención y medicamentos y tampoco está definido cómo se hará su entrega”, manifiesta el congresista.

Según él, “no creo que saquemos la reforma de la Comisión, si se agota el primer debate, tiene quince días para irse a plenaria. Mejor dicho, se quedará en la mitad del camino, yéndole muy bien” y sentencia: “No habrá reforma a la salud en el 2025″.

“No es el mismo texto”

Entre tanto, Jorge Alexánder Quevedo, representante por el Partido Conservador y uno de los coordinadores ponentes del proyecto de ley, afirma que “no es la misma reforma de hace un año, aunque conserva su espíritu”.

Explica que la nueva iniciativa tiene como pilares fundamentales la atención primaria en la salud, pero además propone “generar unas redes integradas e integrales en salud, actualmente en manos de las EPS, las cuales no se articulan entre sí, sino que responden más a un tema de competencia entre estas entidades. Es decir, el paciente no puede ser atendido en un centro médico si no hay convenio con su EPS”.

Igualmente, dice que habrá giro directo, que ya se viene dando en la mediana y alta complejidad, y no como pasaba antes, que el Gobierno enviaba la plata a las EPS y estas decidían a quienes le pagaban y a quienes no. “Por eso, la deuda con hospitales y clínicas”.

Según la oposición, el Ministerio de Salud debe resolver ya la crisis que enfrenta el sistema nacional del sector. | Foto: Revista Semana

Quevedo asegura que también se facilitarán créditos reembolsables a las EPS que quieran convertirse en Gestoras de Salud y Vida, para sanear sus pasivos. “El país necesita una reforma. Como está el sistema, vamos a colapsar. Aquí se necesitan voluntades políticas, que haya una mirada responsable. Esta es una reforma que puede mejorar el sistema”, dice frente al temor de que se hunda en el Senado.

A su vez Alfredo Mondragón representante del Pacto Histórico y coordinador ponente de la iniciativa, afirma que “la reforma busca resolver problemas estructurales, que ha reconocido el Banco Interamericano de Desarrollo y la Organización Panamericana de la Salud, de ineficiencias y gobernanza”. Por eso plantea la administración pública de los recursos públicos con auditoría privada.

“Ya tenemos la experiencia de que la Cámara ha sido más consciente de la necesidad de una reforma que logre resolver problemas estructurales, pero no deja de ser un paso desafiante, porque hay demasiados sectores con poder que van a querer obstaculizar su aprobación”, reconoce.

Y la Asociación Colombiana de Empresas de Medicina Integral, Acemi, anota que es clave identificar los roles de cada actor del sistema, mientras el fortalecimiento de la atención primaria debe comprometer a todos los agentes con recursos suficientes, para no caer en la desfinanciación de los niveles complementarios, así como una gestión integral en salud.

Por eso, pide adelantar acciones para el correcto financiamiento del sistema, que “sin perjuicio del avance de la agenda legislativa, exige medidas urgentes para su liquidez”.