¿Es cierto que un miembro del Gobierno le pidió al ministro de Educación, Alejandro Gaviria, que se apartara del cargo? ¿Cuánto tiempo permanecería José Antonio Ocampo en la cartera de Hacienda? ¿La ministra de Minas, Irene Vélez, soportará una segunda moción de censura? ¿Tantas críticas a la reforma de la salud terminarán por pasarle una factura política a la ministra Carolina Corcho?

Estas preguntas, que están circulando en el ambiente político del país, llevan a un interrogante mayor: ¿Qué tan probable es que se dé una crisis al interior del gabinete de Gustavo Petro?

Carlos Charry, director del doctorado en Estudios Sociales de la Universidad del Rosario, señala que “políticamente sería un error modificar el gabinete, porque los ministros son una representación muy cercana de las fuerzas políticas y electorales que lo llevaron a la Presidencia a Petro”.

Le puede interesar: Gobernadores expresaron las principales preocupaciones de las regiones al presidente Petro

En tanto que el analista político John Mario González sostiene que “parece temprano para que el Presidente se deshaga de algunos de sus ministros, pero se va acercando la hora en que el equilibrismo sea difícil de mantener y el Gabinete tenga que definir su perfil ideológico con la salida de algunos miembros”.

Ahora bien, de darse un ‘revolcón’ en el equipo más cercano a Gustavo Petro, Charry advierte que “quizás lleve, por la orientación ideológica del presidente, a formar un Gobierno más de izquierda radical que de centro izquierda y eso podría implicar que pierda apoyos en el Congreso de la República para la aprobación de sus proyectos de ley”.

Agrega que “aun teniendo su alianza y la coalición de Gobierno, el Ejecutivo está siendo fuertemente criticado, por lo que no es el mejor momento para hacer esos cambios” y que es probable que “dependiendo de las demandas que haya de las diferentes bancadas, Gustavo Petro tendría, incluso, que moderar aún más su gabinete”.

Lo cierto es que las polémicas que se han presentado al interior de los ministros, como por ejemplo entre Carolina Corcho y Alejandro Gaviria por la reforma a la salud, y entre José Antonio Ocampo e Irene Vélez por la cancelación de los contratos de exploración de hidrocarburos han impulsado también la hipótesis de que podría haber cambios en el equipo de Gobierno.

Le puede interesar: Hermano de Petro rindió testimonio en la Fiscalía por presunto 'cartel de abogados'

En ese sentido, el analista González menciona que una primera señal de si se debe modificar el gabinete dependerá de la suerte que corran las llamadas reformas sociales en su trámite legislativo.

“El apoyo que obtenga Petro en las calles durante las marchas del 14 de febrero y el 1 de mayo será clave. Si es multitudinario, el mandatario se sentirá más seguro de ejercitar un pulso con el Legislativo y buscar la salida en unos meses de ministros como Alejandro Gaviria o José Antonio Ocampo, pero si el apoyo es escaso, probablemente quienes deban salir sea Carolina Corcho o Irene Vélez, pues el Gobierno tendría que apoyarse en las fuerzas políticas más moderadas”, explica.

De ahí que insista en que “la suerte del Presidente, del perfil de su mandato y de sus aliados en el Congreso, será una combinación de percepción de apoyo ciudadano, pulso en las calles y maniobrabilidad política en el Legislativo”.

Entre tanto, la docente e investigadora Patricia Muñoz señala que “todas las situaciones que va a vivir el Gobierno pueden generar movimientos de funcionarios al interior del Ejecutivo, puesto que se pueden dar diferentes niveles de sintonía de los ministros con los ciudadanos”.

Y señala que “las diferencias al interior de los gobiernos son normales, pero lo que la Administración de Gustavo Petro no ha encontrado, o en lo que no ha sido asertiva, es en la búsqueda de mecanismos que generen la búsqueda de diálogos y consensos cuando estos sean necesarios al interior de su propio Gobierno”.

No obstante, según la docente, en la medida en que pasen los meses, el Ejecutivo “con diálogos, encuentros, en los llamados retiros, va a encontrar mecanismos más afinados” para lograr consensos alrededor de las políticas y programas que quiera desarrollar en el país.

Le puede interesar: Exministros y exviceministros piden explicaciones sobre la reforma a la Salud

De su lado, el analista y docente Jorge Munévar manifiesta que, más allá del movimiento de funcionarios, el Gobierno Nacional debería generar cambios frente al manejo de la información y las políticas públicas.

“Va a ser necesario que haya cambios, más que haya salidas o no. Son necesarios los cambios en el ambiente y en muchas estructuras que son claves en el Gobierno. Muchas de las designaciones que se han hecho no han sido muy afortunadas. Al contrario, han sido complejas”, indica Munévar.

Y subraya: “Es necesario tener claro qué es lo que quiere el Presidente, cuáles son sus directrices. Si en el gabinete se están estrellando unos con otros, eso crea una incertidumbre en la Nación, eso crea ruido y permite que la oposición aproveche para generar inconformismo”.