Camilo Chaparro, coautor del libro El Dorado de las Farc explica que el grupo guerrillero necesita la paz para poder transformar sus negocios ilegales en lícitos, como la explotación de minas de oro y de coltán.
Dos veteranos reporteros, el vallenato Eccehomo Cetina y el bogotano Camilo Chaparro se dieron a la tarea de investigar un tema tabú en Colombia: la fortuna de las Farc. Ellos, que juntos ya habían escrito un libro sobre las guacas del grupo guerrillero encontradas en la selva hace 13 años, por 147 soldados del Ejército Nacional, quisieron profundizar en este asunto, entre otras razones, por la cantidad de información que les quedó por fuera, ya que en su momento no pudieron corroborar muchos datos. Y porque veían cómo medios internacionales hacían cálculos sobre a cuánto podría ascender el dinero del grupo insurgente y aquí en el país esta temática se evadía o de esta poco se hablaba.
El dorado de las Farc, el banco secreto de la guerrilla en la selva es el fruto del trabajo de estos sabuesos periodistas y escritores que entrevistaron a exguerrilleros, combatientes reinsertados, exsecuestrados, familiares de soldados y autoridades para brindarles una idea a los colombianos sobre las sumas de dinero que a lo largo de los años ha movido, enterrado en caletas e invertido legal e ilegalmente, esta agrupación subversiva.
El texto está lleno de interesantes datos y anécdotas como las que detallan, por ejemplo, que los 60 frentes de las Farc logran recaudar al año US$45 millones; que los 147 soldados se llevaron el contenido de 25 canecas, las cuales sumaban en moneda nacional y extranjera unos US$70 millones. O que a un secuestrado lo pusieron a contar tres costales que contenían cinco mil millones de pesos, producto del pago de un plagio. Antes de concluir la tarea el jefe guerrillero lo amenazó poniéndole el cañón de un fusil dentro de la boca para que contara mucho más rápido y sin equivocarse.
Sobre El dorado de las Farc, el periodista Camilo Chaparro habló con El País:
Cualquiera podría pensar que al lanzar el libro en pleno proceso de paz y antes del plebiscito, buscaban inclinar la balanza. ¿Por qué presentarlo en esta época?
Por dos razones: porque el tema estaba caliente, ambos somos reporteros y escribir sobre temas de actualidad nos encanta. Igual, yo estuve a favor del sí, soy amigo del proceso de paz, pero creo que la verdad contribuye, la verdad está por encima de todo y era un libro que creíamos necesario.
¿Han tenido amenazas, represalias por parte de las Farc?
No, ninguna, porque el paso de los días nos están reconfirmando mucho de los datos que están en el libro. Las Farc habían dicho que no tenían dinero, que no tenían cómo reparar víctimas y en la víspera del plebiscito dijeron que iban a revelar el tamaño de su fortuna y que iban a mirar cómo reparaban a las víctimas, eso es importante para nosotros, porque ese era un tema considerado tabú y creo que con el paso de los meses todo se va a ir destapando poco a poco. Lea también: 'Iván Márquez' asegura que las Farc no tienen dinero para indemnizar a víctimas
¿De los grandes cabecillas de las Farc, cuál fue el que más acumuló riqueza en su banco personal?
Las Farc, como muy pocas organizaciones del mundo, reciben una dimensión incalculable de dinero efectivo todos los días por el boleteo, la extorsión, el secuestro, el narcotráfico. Ese dato es importante, primero, porque va a ser un reto para las autoridades encontrar una fortuna de dinero en efectivo que ellos llevan más de 30 años recibiendo y que son profesionales en ocultarlo. Y segundo, porque eso le impedía a la misma guerrilla tener un control total y absoluto sobre sus ingresos. Las fuentes nos aseguran que mucho comandante guerrillero logró acumular una fortuna: El Mono Jojoy, Alfonso Cano, Raúl Reyes. Y el más codicioso acumulando dinero era Jojoy.
Dicen en su libro que Reyes en una ocasión tenía 42 caletas. Dejó 30 para la organización y 12 para él.
Sí, las fuentes dicen que muchos guerrilleros importantes tenían la responsabilidad de acumular dinero de los diferentes grupos e ir centralizando la contabilidad, por bloque, y varios de ellos aprovechaban para tener una cuenta paralela. En el caso de Reyes decía que era una cuenta paralela para el futuro. Pero luego, se veía cómo se pasaban el dinero a la fortuna personal de ellos.
Aseguran que 60 frentes de las Farc al año recaudan US$45 millones. ¿Se atreve a calcular la fortuna global de este grupo?
No, no, es que creo que ni las propias Farc saben a cuánto asciende su fortuna. Creo que ellas tienen contabilidad sobre ingresos globales por narcotráfico, por secuestro, por minería ilegal; una contabilidad formal de los ingresos que aportaba cada uno de los bloques al Secretariado, pero no una contabilidad total y absoluta. Pero esa contabilidad del ilícito, que por un secuestrado, por decir algo, podrían pedir 10 o 5 millones de dólares, era mucho más difícil. Porque dicen los testimonios, muchos frentes no reportaban el total de lo recaudado, no reportaban lo que realmente recaudaban, ya que se quedaban con un porcentaje. Luego, al entregar el dinero a los superiores, estos sacaban otro pedacito y así, hasta llegar a la cabeza de la pirámide a la que le era imposible llevar una contabilidad. Las Farc deben tener una contabilidad de propiedades, que sería mucho más fácil cuantificar, pero del dinero en efectivo no creo que sepan cuánto llegaron a manejar o cuánto pueden tener oculto en la selva.
Es impresionante el episodio del secuestrado al que ponen a contar $5000 millones amenazándolo con un rifle dentro de su boca...
Un secuestrado que duró tres años y medio plagiado, nos relató que en una madrugada lo despertaron tirándole bultos de dinero encima, diciéndole que empezara a contarlos y él creía que ese era el dinero que su familia había pagado por su rescate. Pero al final, después de esa tortuosa contada de dinero, el jefe guerrillero le dijo que ese no era el de su rescate sino el de otro secuestrado. Él probó que era cierto lo que le contaron guerrilleros que lo cuidaban: que habían unos personajes que de vez en cuando pasaban cargando bultos y descansaban en el campamento, eran los encargados de movilizar dinero de un lado a otro en las montañas.
Ustedes dicen en su libro: las Farc han entrado a una etapa de industrialización y capitalización a través de las minas de oro, de coltán y de walframio, necesitan paz para mantener sus negocios y transformarlos de lícitos a lícitos Ese es un motivo que no todos en Colombia tenemos presente
Hay un hecho real confirmado por fuentes oficiales y extraoficiales y es que gran parte de la fortuna de las Farc está parada sobre minas, minas ya explotadas o aún no explotadas, de manera legal e ilegal. Nuestras fuentes nos dicen que gran parte de las licencias de explotación de minería de oro están en manos de las Farc directa o indirectamente porque las tienen a través de compañías que han montado ilegalmente para explotar y de otras compañías legales que tienen para sacar el oro. O sea, las Farc tienen hoy como sostenerse generaciones y generaciones gracias a esa minería. Y esa minería clandestina es multimillonaria, pero sería mucho más multimillonaria, si un día, por medio de un proceso de paz logran, a través de los testaferros o empresas aliadas que tienen, legalizarlas y dedicarse a ese negocio de manera legal. Seguramente el país no se va a enterar porque tanto las fincas como las minas las tienen a través de testaferros, de empresas legales, de compañías multinacionales que van a ayudar a hacer la transición sin que el país se entere nunca que ellos hicieron ese cambio. El narcotráfico es una fuente de ingresos multimillonario, pero es vergonzante, en cambio la minería puede ser vergonzante, pero es menos vergonzante que el narcotráfico y una minería legalizada no es nada vergonzante para una organización que está dando un viraje como grupo económico.
Aseguran que los hijos de los guerrilleros han intervenido en la planificación del futuro de las Farc y ven en la guerra un camino inviable.
Esos hijos de comandantes guerrilleros que estudiaron en México, Brasil y Europa han regresado al país a manejar básicamente negocios. Ellos saben que esta guerra es inviable y saben que hay que darle una vuelta a la página para, primero, establecer una organización política y mirar si por ahí pueden llegar al poder. Y segundo, porque saben que no les queda otro camino, porque además, es una organización rica que no necesita que nadie las financie porque tiene todos los recursos.
Destacan por su preparación al hijo del Mono Jojoy. ¿Quién es él?
Chepe, hijo del Mono Jojoy, es un hombre con buena formación académica, está hoy en el monte, pero ya no ve el uso de las armas para el futuro de la organización. Él, dicen nuestra fuentes, tiene su base de operaciones en los Llanos del Yarí y él visualiza una guerrilla desmovilizada, en paz y dedicada a la política y a los negocios.
Aseguran que Caletas en el Yarí están en predios legalizados. Para las autoridades será un reto enorme poder hallar ese dinero...
Las Farc han ido consolidando haciendas que han ido legalizando a través de testaferros y allí tienen concentradas caletas con miles de millones de pesos. O sea, la caleta que le encontraron a las Farc los soldados hace trece años es la prueba reina de que así escondían el dinero y que así lo mantienen escondido. Ese volumen tan grande de dinero en efectivo las Farc no pueden consignarlo, así que una manera de guardarlo es encaletarlo e ir gastándolo poco a poco. La caleta que cayó que es de una cifra multimillonaria no le hizo ni cosquilla a las cifras de las Farc. Ahí está la génesis de que mucho del dinero lo encaletaron, porque es que todo el dinero en efectivo que reciben no lo van a ir a consignar al Banco de la República. Por su volumen eso se les convierte en un problema y como son guerrilleros que se están moviendo por la persecución intensa del Ejército, ¿qué les quedaba? Esconderlo bien en esa especie de bancos subterráneos.
Soldados de la guaca ¿Cuál es la situación hoy de los soldados que hallaron la guaca hace 13 años? La mayoría están libres y pobres porque los capturaron, pagaron años de cárcel, muchos gastaron dinero en su defensa, mucho dinero lo derrocharon. Están muy pocos en la cárcel terminando de pagar su pena. Algunos de ellos entregaron solo una parte de lo que les dieron y montaron pequeños negocios. Pero la mayoría perdió su dinero porque los capturaron y entregaron la plata y otros se lo gastaron muy rápido. Es que se volvieron locos. Por cambiar con otro compañero un turno en la cocina pagaban hasta $25 millones cuentan ustedes en su libro Ese episodio de la guaca es digno de Macondo, es una cosa chistosa, insólita, creer que podrían mantener en secreto el hecho de haberse encontrado en la selva una caleta multimillonaria, en pesos y en dólares, 147 soldados de dos compañías militares que no eran amigos y luego llegar a una ciudad tan pequeña como Popayán a tratar de disimular todo ese dinero y se lo gastaron en el comercio, mujeres, tragos. Ocultar ese secreto fue muy difícil para ellos y por eso cayeron todos.