Los cálculos biliares, también conocidos como litiasis vesicular, se conocen como pequeñas partículas sólidas que se forman en la vesícula, un pequeño órgano situado debajo del hígado. Estos cálculos pueden ser asintomáticos durante un largo periodo, pero en ocasiones, pueden bloquear el conducto biliar, lo que causa una serie de síntomas perjudiciales para la persona.

¿Cuáles son los síntomas de los cálculos en la vesícula?

De acuerdo con médicos especializados, algunos síntomas de esta enfermedad corresponden a:

Síntomas de esta enfermedad. | Foto: Jan-Otto

Dolor en la parte superior derecha del abdomen

El dolor en la parte superior derecha del abdomen es uno de los síntomas clínicos más reveladores de presentar cálculos biliares. aunque este puede presentarse en diversas clases de intensidad, suele ser agudo, punzante y a menudo presentarse como un dolor intolerable.

Este malestar, se debe a la obstrucción que causan los cálculos cuando bloquean los conductos biliares, generando una acumulación de bilis en la vesícula y generando presión sobre las paredes de la misma, lo que conduce al dolor referido.

Problemas digestivos

Tener esta complejidad puede alterar significativamente la función normal del sistema digestivo. Una de la manifestación más común de los cálculos es la indigestión. Los pacientes con esta afección la describen como una sensación de malestar después de comer, que viene acompañada por distensión abdominal, gases y eructos.

Según informó el portal lavidalucida.com, “esta indigestión se genera debido a la incapacidad del sistema para digerir de forma adecuada los alimentos, especialmente aquellos ricos en grasas, debido al flujo restringido de bilis al intestino”.

Las nauseas pueden ser un síntoma de cálculos en la vesícula. | Foto: Copyright Dazeley

Náuseas y vómitos

Las náuseas y vómitos son síntomas que puedes reflejar diferentes patologías médicas, pero su asociación con los cálculos biliares es particularmente significativa. Los episodios de dolor intenso puede deberse a la obstrucción causada por las piedras en el conducto biliar, que pueden ir acompañadas de manifestaciones gastrointestinales.

Orina oscura

cuando se acumula en el sistema, los riñones pueden comenzar a filtrar el exceso de bilirrubina, produciendo una orina más oscura y a menudo, es el problema hepático o biliar antes de que la piel o los ojos comiencen a mostrar signos de ictericia.

Fiebre y escalofríos

Información suministrada por la mayoclinic.org señaló que “la fiebre y los escalofríos son síntomas graves que pueden indicar una complicación de la litiasis vesicular conocida como colecistitis aguda”. Esta es una inflamación de la vesícula que puede ser causada por una infección secundaria o una obstrucción prolongada.

Cuando se presenta fiebre y escalofríos, junto con otros síntomas mencionados anteriormente, se debe buscar atención médica de forma inmediata. Lo anterior, teniendo en cuenta que al presentar dichos síntomas, la persona no solo podría presentar cálculos biliares, también sugiere que la condición ha progresado y es necesario realizar intervención médica de manera urgente a fin e prevenir complicaciones adicionales.

Tratamientos para los cálculos en la vesícula

El portal web tucanaldesalud.es señaló que “el tratamiento de esta enfermedad varia en función del estado y la gravedad de la misma”, es por ello, que en muchos no será necesario la realización de alguna cirugía y a cambio, se optará por consumir diferentes medicamentos que puedan aliviar el dolor, haciendo un seguimiento exhaustivo para saber cómo avanza la enfermedad.

Para tratar esta enfermedad, se recomienda realizar algún tipo de cirugía. | Foto: (c) Copyright 2023, dpa (www.dpa.de). Alle Rechte vorbehalten

En los casos en los que es detectada una litiasis, se recomienda la extirpación de las piedras por medio de una cirugía laparoscópica o mínimamente invasiva, el portal mencionado concluyó que “el dolor postoperatorio es leve o moderado durante las primeras 24-48 horas y cede con analgesia convencional. Además, la reincorporación al trabajo y a la vida normal suele ser a la semana de la intervención quirúrgica”. Otras de las ventajas que presenta este procedimiento son:

  • Reducción del tiempo de estancia hospitalaria
  • Menor riesgo de complicaciones frente a una cirugía abierta
  • Un cuidado más sencillo de las pequeñas heridas provocadas por las incisiones