El azúcar es un alimento necesario para el cuerpo, sin embargo, todo en suma es nocivo, y este caso no es la excepción. Los altos niveles de azúcar en el organismo pueden desembocar en problemas de salud como la obesidad o la diabetes.
No obstante, hay que aclarar que es fundamental que el cuerpo cuente con niveles estables de glucosa, la cual es el resultado después de que el organismo metabolice la azúcar.
Es decir, en altas cantidades es nociva, pero tampoco se puede presidir de ella, ya que podría tener una baja de glucosa sufriendo mareos, debilidad, desorientación e incluso desmayos.
“Por lo general, el medico advierte al paciente que tiene diabetes tipo 2 en base a los resultados de pruebas de laboratorio que miden el nivel de azúcar en la sangre. La mayor parte de pacientes con diabetes tipo 2 no tienen síntomas”, aseguró Víctor Montori, doctor endocrinólogo especialista en diabetes de la Clínica Mayo de Estados Unidos.
“Los síntomas son más comunes en pacientes con diabetes tipo 1, cuando los niveles se mantienen muy elevados por mucho tiempo. Es posible que se desarrolle fatiga, sed, hambre, exceso de orina, visión borrosa y pérdida de peso”, puntualizó el experto.
Cabe resaltar que la diabetes del tipo 1 se presenta con frecuencia en los niños. Por lo general, los síntomas son más intensos y aparecen con menos frecuencia, tales como sed intensa, pérdida de peso, orinas frecuentes, cansancio y somnolencia.