Los antioxidantes son moléculas que impiden la oxidación de otras. Es decir, impiden la reacción química que sucede cuando una molécula pierde un electrón pasándoselo a otra molécula. Este proceso puede llegar a dañar las células y puede, según los expertos, contribuir al desarrollo de enfermedades crónicas. Los científicos han descubierto que existen dos tipos de antioxidantes, unos solubles en agua, que se encuentran, primordialmente, en el citoplasma celular, y el plasma sanguíneo. Mientras que los antioxidantes liposolubles se pueden disolver en grasa y están en las membranas celulares.
Cabe anotar que consumir antioxidantes puede proteger las células, reducir el riesgo de enfermedades, mejorar la función inmunológica y promover la nueva salud de la piel. Según los científicos, las mejores fuentes antioxidantes son las frutas, las verduras, las legumbres, las nueces, el té verde y el chocolate.
Los alimentos que rejuvenecen la piel
El envejecimiento de la piel es un proceso natural que puede ser aumentado por otros factores como la genética, la sobreexposición al sol, la mala alimentación y un estilo de vida poco saludable. Sin embargo, el consumo de algunos alimentos pueden retrasar el envejecimiento.
Los alimentos recomendados son los arándanos, las fresas, las uvas rojas, y todos los vegetales de hojas verdes. Los expertos recomiendan, en general, todos aquellos alimentos que tengan un alto contenido de vitamina C, un antioxidante soluble en agua. También es recomendable consumir frutos secos y semillas junto a aguacates, tomates, papaya y grandes cantidades de agua.
Es importante recordar que siempre antes de consumir cualquier alimento o de incluir algún elemento nuevo a la dieta es necesario consultar con un especialista, pues se deben evaluar las condiciones particulares de cada persona antes de comenzar algún tipo de tratamiento. Además, los expertos siempre recomiendan para una piel sana el uso constante de bloqueador solar.