La memoria es el proceso de almacenamiento para luego recordar esta información, de acuerdo con Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.

Además, explicó que hay dos tipos de memoria:

  • La memoria de corto plazo almacena información por unos pocos segundos o minutos.
  • La memoria de largo plazo la almacena por un período más largo de tiempo.

Adicional, es importante señalar que la memoria no funciona siempre a la perfección, ya que a medida que envejece, se puede tomar más tiempo para recordar las cosas.

El cerebro es como una computadora que controla las funciones del organismo. | Foto: Getty Images

Por ello, el portal portugués de salud, nutrición y bienestar, Tua Saúde, reveló que las vitaminas y nutrientes para evitar problemas de memoria son:

  • Vitamina E: Esta vitamina desempeña un papel muy importante en la protección del SNC, actuando como antioxidante y contribuyendo en la prevención de la demencia.
  • Vitaminas del complejo B: Además de todas las funciones que desempeñan en el organismo, este grupo de vitaminas también contribuyen para el funcionamiento normal del sistema nervioso y el metabolismo de energía, mejorando así la capacidad de memoria y concentración, reduciendo el cansancio y la fatiga.
  • Magnesio: Este mineral contribuye para el funcionamiento normal del sistema nervioso central (SNC), de la función psicológica y para el metabolismo normal productor de energía, ya que participa en la transmisión de impulsos nerviosos, aumentando la capacidad de aprendizaje y memorización.
  • Colina: Está relacionada con el aumento de la funcionamiento cognitivo y con la prevención de la pérdida de memoria, ya que contribuye para la estructura de las membranas celulares y para la síntesis de acetilcolina, que es un importante neurotransmisor.
  • Zinc: Este es un mineral que posee varias funciones en el organismo, y entre ellas ayuda a mantener una función cognitiva normal.
Las vitaminas son sustancias que tienen varias propiedades. | Foto: © 2022 Yiu Yu Hoi

Por su parte, para evitar los problemas de memoria, Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, recomendó:

1. Hacer ejercicio: La actividad física aumenta el flujo sanguíneo a todo el cuerpo, incluido el cerebro, y esto puede ayudarte a mantener una buena memoria. Así las cosas, lo ideal es realizar al menos 150 minutos a la semana de actividad aeróbica moderada, como caminar a paso ligero, o 75 minutos a la semana de actividad aeróbica intensa, como trotar.

2. Tener una dieta saludable: Una dieta saludable para el cerebro, incluye frutas, verduras y granos o cereales integrales, y lo ideal es elegir fuentes de proteína bajas en grasa, como pescado, frijoles (alubias, porotos) y aves sin piel.

Entretanto, la entidad sin ánimo de lucro también recomendó estimular la mente con juegos como el crucigrama, las sopas de letras o también sirve aprender a tocar algún instrumento.

Adicional, explicó que “la interacción social ayuda a prevenir la depresión y el estrés, factores que pueden contribuir a la pérdida de memoria”.

Sobre la misma línea, es importante dormir bien, ya que si no dormir lo suficiente se ha relacionado con la pérdida de memoria, al igual que el sueño intranquilo y las alteraciones frecuentes del sueño. Por ello, los adultos deben dormir regularmente de siete a nueve horas cada noche.

El cerebro representa menos del 2 % del peso de una persona. | Foto: Getty Images

De todos modos, la información antes dada no sustituye la asesoría médica y es de vital importancia consultar a un experto de la salud para que sea este quien explique el tema mencionado.

Además, es importante buscar ayuda si se está presentando pérdida de memoria y este hecho afecta la capacidad para hacer las actividades diarias, si se nota que la memoria empeora, o si un familiar o amigo está preocupado.