La canela es una especia a la que se le atribuye una serie de propiedades beneficiosas para el organismo. Según la Fundación Española de Nutrición, aporta nutrientes y destaca por su contenido de minerales como calcio, hierro, zinc, selenio y potasio, además de vitaminas A, B6 y C; fibra, y carbohidrato
Entre los muchos beneficios, los expertos aseguran que ayuda a proteger la salud del corazón. Sus componentes cinamaldehído y ácido cinámico, son cardioprotectores debido a su propiedad antiinflamatoria y a su capacidad de producir óxido nítrico, un compuesto que hace que las arterias se relajen y la sangre fluya más fácilmente.
Así mismo, en el portal Tua Saúde aseveran que la canela ayuda a inhibir los canales de calcio, que en conjunto con el óxido nítrico, contribuyen para mantener la presión arterial baja.
“Posee propiedades antioxidantes que evitan el daño causado por los radicales libres a las células, disminuyendo así el estrés oxidativo y mejorando el aprendizaje y la memoria, siendo capaz de proporcionar protección contra la enfermedad de Alzheimer, la demencia y enfermedad de Parkinson”, agregan en el portal citado anteriormente.
Maneras de involucrar la canela en la dieta
Canela en el desayuno: la canela se puede añadir para darle sabor a un pan, tostada o galleta 100 % integral. También hay personas que la emplean para endulzar o cambiar el sabor de una bebida, incluso del agua. Esta especia es ideal para añadirla en el plato de avena que consumen algunas personas durante el desayuno. Se le puede añadir a una porción de fruta picada; el sabor de la canela va muy bien con la naranja y el banano.
Canela en recetas de horno: esta especia es usada de manera frecuente en la repostería, ya que en algunas ocasiones se emplea como sustitutivo del azúcar. “La canela se combina muy bien con la harina seca, eso sí se debe mezclar bien para que no queden grumos. Si la receta ya incluía canela se le puede añadir un poco más”.
Canela para las galletas: para quienes les gusta la repostería, la canela en polvo también suele emplearse para decorar galletas y sustituir el uso de azúcar o endulcorantes y aportarle algo de sabor natural a la preparación.
Se puede consumir por medio de un té o una infusión: para prepararlo se necesita una rama de canela y una taza de agua. Poner a hervir el agua y cuando esté en su punto máximo de ebullición hay que colocar la rama de canela en un vaso y añadirle el agua caliente. Después colar e ingerir.