El mes de nacimiento podría tener un impacto notable en cómo las personas experimentan y gestionan el estrés, según investigaciones psicológicas y astrológicas. Aunque este estado está condicionado por numerosos elementos como la personalidad, el entorno y las vivencias personales, algunos expertos señalan que la época del año en que nacemos también podría influir de manera relevante.

El estrés, una reacción natural del organismo frente a desafíos o amenazas, puede manifestarse de formas muy diferentes entre individuos, dependiendo de factores como la genética, las condiciones ambientales y las características personales.

El País consultó con la inteligencia artificial de ChatGPT, la cual señaló que el mes de nacimiento podría tener un impacto significativo en la predisposición de una persona al estrés. Esta fascinante conexión entre la astrología y la psicología contemporánea sugiere que las estaciones del año y otros factores ambientales podrían influir en este aspecto.

¿Cuáles son los meses asociados al estrés?

Según un análisis realizado por un modelo de inteligencia artificial, las personas nacidas en enero, marzo, julio y noviembre tienden a experimentar el estrés de manera más intensa. La IA basó sus conclusiones en un amplio conjunto de datos que incluyó rasgos de personalidad, reacciones ante situaciones de presión y hábitos cotidianos de miles de personas.

El estrés es un factor presente en la vida de muchas personas. | Foto: Jamie Grill Photography

Una de las teorías que respalda este hallazgo es la influencia de las estaciones en el desarrollo temprano de los bebés. Por ejemplo, quienes nacen en enero y marzo, meses asociados al invierno o al inicio de la primavera en muchas regiones, podrían haber experimentado menos exposición a la luz solar y bajas temperaturas en sus primeros meses de vida. Esto podría impactar en los niveles de serotonina y vitamina D, sustancias relacionadas con el estado de ánimo y la gestión del estrés.

Estas variaciones podrían hacer que sean más sensibles a situaciones estresantes, especialmente en la adultez. | Foto: www.peopleimages.com

Por otro lado, las personas nacidas en julio y noviembre atraviesan sus primeros meses en pleno verano o finales de otoño, épocas que podrían afectar su temperamento debido a cambios en la interacción social y la actividad física. Estas variaciones podrían hacer que sean más sensibles a situaciones estresantes, especialmente en la adultez.

Aunque el mes de nacimiento es un aspecto interesante para considerar, los psicólogos enfatizan que no es un factor decisivo. La capacidad de una persona para manejar el estrés está profundamente influida por sus experiencias de vida, habilidades emocionales y entorno social.

El análisis realizado por la inteligencia artificial también encontró que las personas nacidas en estos meses suelen mostrar una mayor sensibilidad emocional. Esto las lleva a experimentar emociones con mayor intensidad, lo que puede ser una ventaja en términos de empatía y creatividad, pero también un reto cuando se enfrentan a situaciones de alta presión.

*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de El País.