En la rutina diaria de mantenimiento de un vehículo, uno de los aspectos más fundamentales, pero a menudo descuidados, es el estado de las llantas. Conducir con llantas desgastadas o en mal estado no solo compromete la eficiencia del combustible y el manejo del automóvil, sino que también representa un riesgo significativo para la seguridad vial. Pero ¿con qué frecuencia se deben cambiar las llantas de un carro?

Expertos en seguridad vial y fabricantes de llantas coinciden en que no existe un intervalo de tiempo específico para el reemplazo de las llantas, ya que varios factores pueden influir en su vida útil. La condición de las carreteras por las que se conduce, el estilo de conducción del propietario y el mantenimiento regular del vehículo son solo algunos de los elementos a considerar.

Sin embargo, una regla general es inspeccionar las llantas al menos una vez al mes para detectar signos de desgaste o daño. Las señales de desgaste irregular, falta de profundidad en las ranuras de la banda de rodadura, grietas o abultamientos son indicativos de que es hora de un cambio.

Otro indicador importante es la profundidad de la banda de rodadura. Las llantas nuevas suelen tener una profundidad de aproximadamente 8 a 10 mm, y se recomienda reemplazarlas cuando la profundidad restante sea inferior a 2 mm. Una banda de rodadura insuficiente afecta la capacidad de tracción del vehículo, especialmente en condiciones de lluvia o nieve.

Llantas de los carros. | Foto: Getty Images

El clima y las condiciones ambientales también desempeñan un papel crucial en la vida útil de las llantas. Las altas temperaturas pueden acelerar el desgaste, mientras que la exposición prolongada al sol puede causar envejecimiento prematuro del caucho.

Además de las inspecciones regulares, los conductores deben prestar atención a las recomendaciones del fabricante del vehículo y seguir un programa de rotación de llantas para garantizar un desgaste uniforme.

*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de El País.