Tomar la decisión de comprar un carro puede ser la más importante para muchas personas y aunque parece sencillo, esta puede llegar a se una tarea compleja, puesto que en el mercado se encuentra una serie de referencias, estilos y versiones, cada uno respondiendo a las necesidades de cada comprador.
Por lo general, los fabricantes ofrecen varias versiones de sus modelos, la gran diferencia se encuentra en el tipo de transmisión, es decir, el modo en que pasan las marchas cuando el auto está en movimiento. En otras palabras, las características de los autos automáticos o mecánicos.
Entre las diferencias más notorias de los autos automáticos de los mecánicos es la palanca de cambios, ya que, la mayoría de las ocasiones, al verla se puede saber qué tipo de transmisión tiene el vehículo, teniendo en cuenta que la nomenclatura (solo letras) en los autos automáticos es ligeramente distinta a la de los autos manuales que usan números.
Más allá de que se prefieran las letras o los números, una gran diferencia entre estos tipos de vehículos es los carros autos automáticos pasan los cambios de marcha de forma autónoma, evitando que el conductor realice otra acción más que mover la palanca para avanzar o retroceder.
Mientras que los carros manuales necesitan de un pedal de embrague, el cual conecta con la caja de cambios con el motor, este es uno de los puntos que más se complica al momento de aprender a manejar este tipo de autos, es porque este embrague debe manipularse de forma sincronizada con el movimiento de la palanca, lo que demanda concentración y habilidad motora; sin embargo, después de aprender es una acción que se da de manera natural.
Otro aspecto a considerar es que por lo general los vehículos automáticos pueden llegar a consumir más combustible que un auto manual. Sin embargo, con el tiempo los tiempos han cambiado y ahora se pueden encontrar cualquiera de los dos tipos de autos, con un buen presupuesto para mantener.
Cómo limpiar el motor de un carro
Preparación antes de limpiar el motor
Antes de comenzar la limpieza del motor, asegúrese de tomar algunas precauciones importantes. Desconecte la batería y asegúrese de que el motor esté frío para evitar quemaduras. Cubra las partes eléctricas y las áreas sensibles con bolsas de plástico o papel de aluminio para evitar la infiltración de agua.
Herramientas y productos necesarios
Para limpiar el motor de su auto, necesitará algunas herramientas y productos adecuados. Algunas de las herramientas comunes incluyen un cepillo de cerdas suaves, una pistola de agua de baja presión, un desengrasante automotriz y un trapo o paño absorbente. Asegúrese de utilizar productos específicamente diseñados para la limpieza de motores.
Proceso de limpieza paso a paso
El proceso de limpieza del motor consta de varios pasos. Primero, rocíe el desengrasante sobre las partes del motor y déjelo actuar durante unos minutos. Luego, utilice el cepillo de cerdas suaves para frotar suavemente las áreas con suciedad persistente. Luego, enjuague el motor con agua de baja presión y séquelo cuidadosamente con un trapo o paño absorbente.
Otras recomendaciones que debería tener en cuenta a la hora de lavar el motor del auto:
- Evita el exceso de agua: Durante la limpieza del motor, es importante no utilizar una presión de agua alta ni rociar agua en exceso. Un exceso de agua puede causar daños en componentes eléctricos y electrónicos, así como en las partes sensibles del motor. Utilice una pistola de agua de baja presión y asegúrese de enjuagar el motor de manera controlada.
- Utiliza desengrasante adecuado: Es crucial seleccionar un desengrasante automotriz seguro y eficaz para la limpieza del motor. Evite productos domésticos o desengrasantes demasiado agresivos que puedan dañar las superficies del motor. Consulte con expertos en vehículos o en tiendas especializadas para obtener recomendaciones sobre los mejores productos disponibles en el mercado.
- Cuidado con los componentes eléctricos: Durante la limpieza, es importante proteger los componentes eléctricos del motor, como las bobinas de encendido, los conectores y los cables. Cubra estas áreas con bolsas de plástico o papel de aluminio y evite rociar agua directamente sobre ellas. Siempre desconecta la batería antes de comenzar la limpieza para evitar posibles daños eléctricos.