El motor es prácticamente la vida de un vehículo y es fundamental para la actividad general del mismo, por lo que si llega a presentar problemas y no son atendidos en el momento adecuado pueden causar que el carro no vuelva a funcionar.
El consejo más sencillo que cualquier especialista puede darle es nunca obviar ningún síntoma de problema o avería. Ya que si lo deja pasar lo más probable es que termine visitando el taller y desembolsando una cantidad de dinero considerable. Sin embargo, esto no tiene por qué ocurrir si toma las precauciones pertinentes.
Por ello, para evitar que esto pase le recomendamos hacer un mantenimiento constante y acudir a centros especializados para asegurarse que el motor funcione en óptimas condiciones.
Así que para que usted tenga el motor de su automóvil en perfecto estado, aquí le presentamos una una lista de los problemas se pueden ocurrir antes de que el motor sufra daños.
- Baja compresión: El motor no podrá realizar su tarea de combustión si el aire y el combustible no se comprimen de forma eficiente. Para evitar que suceda esto es indispensable que la válvula de control esté adecuadamente sellada.
- Radiador obstruido: Usualmente el radiador termina obstruido a causa de sedimentos que vienen de un líquido refrigerante impuro. La dureza del líquido produce el sobrecalentamiento del motor y por consiguiente la destrucción gradual del radiador.
- Cambio de velocidad inestable: Esto sucede cuando el vehículo no logra controlar bien los cambios de velocidad al punto donde puede llegar a apagarse. Su causa está en un mal funcionamiento del sensor del acelerador, al captar datos erróneos no controla las revoluciones del motor.
- Mal funcionamiento en la bomba de aceite: Las pérdidas de aceite pueden hacer que el motor deje de funcionar, esto pasa porque el vehículo tiene una bomba de aceite defectuosa. Lo ideal es que el motor posea un nivel de viscosidad recomendado para poder cumplir con su funcionamiento.
- Fuga de líquido refrigerante: Si nota que el motor se sobrecalienta al encender su vehículo, posiblemente tiene una fuga del líquido refrigerante. Es por ello que es necesario hacer revisiones periódicas en el taller y comprobar que el líquido refrigerante no tenga impurezas.
- Aceite impuro: Tener una alta formación de depósitos de aceite en las cámaras de combustión, válvulas de admisión y bujías es peligroso. Las impurezas del aceite terminan insertándose en la superficie, dañando gravemente los rodamientos.
De otro lado, tenga en cuenta las siguientes recomendaciones para extender la vida útil del motor.
- Evitar acelerar y detenerse bruscamente: las frenadas y el aceleramiento violento puede dañar el desempeño del motor al sobre exigir los cambios de potencia, además de desgastar los frenos y la transmisión.
- Evitar los tramos cortos: el encender y apagar el motor en breves períodos de tiempo afecta su vida útil. Para tramos de pocas cuadras, caminar puede ser una buena opción para evitar el desgaste innecesario del vehículo.
- Cuidar el nivel de combustible en el tanque: la nafta vieja forma sedimentos y para que estos no lleguen al motor, es aconsejable que el tanque siempre esté lleno por encima del cuarto de su totalidad.
- Elegir el lubricante adecuado: la ausencia de un lubricante apropiado desencadenaría en el rápido desgaste del motor ya que la fricción o rozamiento de metal con metal provoca altas temperaturas, desgaste abrasivo de las piezas y, en extremo, que terminen soldándose unas con otras. La adecuada lubricación de todas las piezas permite enfriar el motor y mantenerlo limpio de los contaminantes propios de la combustión interna.
Una vez que el motor se puso en marcha, el lubricante debe garantizar que la temperatura se mantenga en un rango óptimo para evitar el sobrecalentamiento, retener su viscosidad y fluidez y proteger a las zonas más críticas del motor.