CALI DISTRITO ESPECIAL
¿En qué va Cali Distrito Especial?
Concejo pide despejar financiamiento de futuras localidades. Reformas entrarán a operar en 2024.
Solo a partir del segundo semestre de este año el Concejo Municipal empezaría a debatir el futuro de lo que será la transformación de Cali en Distrito Especial, aunque preocupa desde ya la financiación de las localidades a conformarse junto a las reformas administrativas y al Plan de Ordenamiento Territorial, POT.
Por lo menos así lo plantearon varios concejales consultados, quienes señalaron que por ahora “todo se encuentra en el papel”, es decir, que no hay definiciones para la transición de la ciudad a un nuevo modelo administrativo y fiscal.
En otras palabras, falta la reglamentación de la Ley 1933 del 2018, que elevó a la capital del Valle a la categoría de Distrito Especial, lo cual supondrá profundos cambios en la vida y actividad de los 2,1 millones de habitantes de esta urbe a partir del año 2024, una vez el Concejo le dé luz verde a las reformas que se prevén para la división política del territorio local.
Según el concejal Roberto Rodríguez, “hoy la prioridad es el Plan de Desarrollo de la Administración Ospina (en las próximas sesiones extras y ordinarias) y para ello será necesario trazar estrategias para avanzar hacia Cali Distrito Especial. Pero por ahora no se ha dado ningún paso en ese sentido”.
Anota que “no es un tema de corto plazo, sino de mediano y largo plazo, y podría sin problema demorarse de seis a diez años en su implementación, especialmente por el tema de recursos, porque el compromiso que deberá adquirir la ciudad será gigantesco para convertirse en Distrito”. En otras palabras, eso le correspondería al próximo Alcalde.
Consideró el edil que un presupuesto de alrededor de $3,6 billones (como el del 2020) “es insuficiente por ahora para comprometernos en esa tarea”.
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De acuerdo con una primera propuesta esbozada el año pasado, Cali eliminará las actuales comunas para crear al menos seis localidades cuyo manejo estaría a cargo de igual número de alcaldes menores con autonomía financiera y administrativa.
Esa propuesta planteó inicialmente la creación de las localidades Aguacatal, Cauca Norte y Cauca Sur, El Pondaje, Pance Lili y Cañaveralejo. Todo apuntaría que en el Concejo le introduciría cambios a esa conformación una vez empiecen los debates a partir de julio de este año.
El concejal Fernando Tamayo también expone algunas dudas acerca del tema financiero dentro de ese proceso, lo mismo en cuanto al Plan de Desarrollo. “El papel y la palabra pueden con todo. Por ahora el proyecto de Distrito Especial está en el limbo, e incluso podría aplazarse para julio del 2021”.
Anota que “el mayor drama que enfrenta esta administración es qué hacer que todas las buenas ideas que tiene para que se conviertan en realidad. Todas esas ideas deben ir acompañadas de posibilidades económicas o financieras”.
Hace poco se ventiló que el Plan de Desarrollo del alcalde Jorge Iván Ospina costaría entre $11 billones y $13 billones para los próximos cuatro años.
Al respecto Tamayo pone de presente que “el municipio en este momento no tiene muchas posibilidades económicas, pues posee solo una capacidad de endeudamiento de apenas $40.000 millones y para las obras físicas quedaron en caja alrededor de $25.000 millones”.
Así las cosas, resaltó que el plan (en cuanto a obras) podría ejecutarse bajo una alianza público privada APP, “pero frente a las necesidades del municipio estamos cortos presupuestalmente, y más ahora con el tema del coronavirus que nos demandaría recursos adicionales, lo que tendría un efecto demoledor a nivel presupuestal, pues eso le abre un hueco a las finanzas locales, ya que la prioridad es el sistema de salud”.
No perder tiempo
El año pasado el tema del Distrito Especial se ventiló con base en las expectativas que había en la última etapa de la administración de Maurice Armitage, pero no avanzó.
Para el concejal Milton Castrillón la ciudad ha perdido dos años en ese proceso, y si no hace en el 2020 se completarían tres años en ese limbo.
“Le pedí al alcalde Ospina que reglamentemos pronto la ley organizando el Distrito y para ello se necesitará una reforma parcial del POT para modificar los territorios en las comunas y los corregimientos para la creación de las localidades”.
“Esta herramienta jurídica es fundamental para la ciudad y creo que la estamos desaprovechando. Estamos perdiendo una oportunidad de oro porque al ser Distrito Especial, Cali pierde recursos que le pueden servir a la ciudad como, por ejemplo, las regalías, mientras las propiedades de la Nación, incluyendo las que están en cabeza de la Sociedad de Activos Especiales, SAE, pasarían a ser del Municipio”, agregó el edil.
Castrillón puso como ejemplo, los lotes del antiguo Club San Fernando y otros, los que dijo no hubiera sido necesario comprarlos con recursos del fisco, “ya que si ya fuéramos Distrito habrían pasado directamente de la Nación a la ciudad”.
En cuanto a financiación, opinó que no habría problemas, ya que el Gobierno Nacional una vez reglamentado el Distrito Especial, Cali comenzaría a recibir dineros de manera directa. Sostiene que ese proceso no tardaría diez años como se ha mencionado.
El concejal Juan Pablo Rojas coincide con Castrillón al señala “que la transformación de Cali en Distrito Especial es una necesidad y nosotros estamos en disposición de apoyar ese proceso para que sea una realidad”.
Sin embargo, admitió que “esa tarea todavía está en pañales y nos falta caminar mucho, por lo que será necesario trabajar de manera muy articulada entre el Gobierno local y el Concejo para sacarla porque muchas cosas van a cambiar”.
Rojas subrayó, asimismo, que otras cosas también cambiarán con el Plan de Desarrollo del actual Gobierno local en los próximos cuatro años, aunque también admite que los recursos son pocos y no hay claridad sobre cómo operará esa futura descentralización, ya que “todo está por ahora sobre el papel”.
Responde Planeación Municipal
Frente a las inquietudes acerca de la reglamentación de la ley del Distrito Especial y porque ese proceso está en el limbo, el director de Planeación Municipal, Roy Alejandro Barreras, puso de presente que esa tarea vendrá una vez se apruebe en el Concejo el Plan de Desarrollo del alcalde Ospina.
Todo ello, subrayó, porque “en parte porque tendremos que revisar con mucho más detalle –no replantear—sino profundizar el modelo que había planteado la anterior administración”.
Sostuvo que “nosotros no queremos que Cali Distrito Especial no sea solo simplemente una división política por localidades, sino que se convierta en una transformación institucional que haga de la ciudad un territorio más democrático que permita a la ciudadanía, y sobre todo a la nueva ciudadanía (los jóvenes) que se sienta más representad en sus intereses”.
Según Barreras en la que la medida en que se logre un el aparato administrativo más incluyente, Cali podrá alcanzar unas metas de progreso de mayor alcance social. “Eso requiere, por lo tanto, un mayor estudio con detalles”.
En cuanto a cambios a los cambios parciales al Plan de Ordenamiento Territorial, POT, el funcionario indicó que es un planteamiento que ha hecho el Alcalde, una vez el Plan de Desarrollo tenga luz verde, y “eso posible mente tenga que ver con el tema del Distrito Especial”.
En cuanto a los temores de que no solo el Plan de Desarrollo y la transformación de Cali en Distrito Especial, Barreras, consideró que “no se trata de que se necesiten mayores cantidades de dinero, sino que es fundamental una mayor redistribución de los mismos de una manera más equitativa e incluyente en las futuras localidades a conformarse”.
En ese sentido, el Jefe de Planeación resaltó que “no queremos colgarle esas responsabilidades a las futuras alcaldías menores, sino que estas logren un mayor desarrollo de sus capacidades de una manera más robusta y eficiente (en inversiones y gastos), para que ese proceso no sea solo una administración más descentralizada en recursos, sino en una mayor cercanía con la gente en materia de programas”.
Dijo que que en este cuatrienio se hará la transición progresiva hacia el Distrito, porque finalmente los alcaldes menores y los ediles solo podrán ser elegidos dentro de cuatro años. Es decir, que hacia el 2024 empezaría a operar.