“Fronteras invisibles siguen exponiendo la vida en el oriente de Cali”: concejal Roberto Ortiz sobre video de batalla campal en Petecuy

La ciudad de Cali se encuentra sumida en un clima de temor debido a los constantes enfrentamientos que tienen lugar en las denominadas “fronteras invisibles”. Estos límites ficticios, establecidos por pandillas al interior de los barrios populares, han resultado en numerosos daños estructurales en viviendas y han generado una alteración del orden público que ha quedado captada en videos impactantes.

Estas fronteras invisibles, que en ocasiones surgen por disputas de territorio para la venta de drogas y en otras ocasiones por diferencias sin sentido, han llevado a que los jóvenes de la ciudad se enfrenten entre sí en una lucha por “defender” estos límites inexistentes.

El barrio Petecuy fue escenario del más reciente caso, el cual quedó registrado en videos grabados por vecinos que se encontraron en medio de los enfrentamientos. En las imágenes, se puede observar cómo varios individuos se lanzan piedras unos a otros, mientras los residentes observan con asombro desde sus hogares.

Estas son las imágenes de la tremenda batalla campal que tuvo lugar en el barrio Petecuy:

“Esos jóvenes también utilizaron pistolas de balines; incluso un bebé resultó herido en la pierna por eso. Imagínese lo que podría suceder si emplearan armas de fuego, que también suelen utilizar”, relató un vecino del sector que fue testigo de los incidentes.

Además de los heridos, se informó que varios vehículos resultaron dañados y los vidrios de numerosas viviendas fueron impactados por las piedras lanzadas por estos individuos irresponsables.

Por esa razón, el concejal Roberto Ortiz le hizo un llamado a la administración del Alcalde Ospina a tomar medidas que mitiguen esta problemática, la cual no es nueva en la ciudad.

“Las fronteras invisibles siguen exponiendo la vida de quienes habitan el oriente de Cali y lo más grave es ver a jóvenes participando de estos violentos enfrentamientos. Otra vez se demuestra la necesidad que tenemos como ciudad de resolver las necesidades de esta población y brindarles ofertas sociales, culturales, deportivas y empleo”, escribió el cabildante en su Twitter.

Hasta el momento, las autoridades de la ciudad no han emitido un comunicado oficial al respecto. Sin embargo, esta problemática se ha vuelto recurrente y, lamentablemente, ya ha cobrado vidas. Ante esta situación, la comunidad está instando a la Alcaldía a tomar medidas urgentes y establecer un plan de acción para abordar este preocupante fenómeno.

La violencia generada por estas fronteras invisibles ha generado un profundo temor en la ciudadanía, que clama por la intervención de las autoridades para garantizar la seguridad y tranquilidad en los barrios afectados. La implementación de estrategias de prevención y control, así como la promoción de programas de inclusión social, son algunas de las medidas que se esperan para enfrentar esta problemática que afecta a la comunidad caleña.

Estudiantes son obligados a pagar para cruzar fronteras invisibles y llegar a sus colegios

En una reunión celebrada en la Institución Educativa Nuevo Latir, sede Isaías Duarte Cancino, en Cali, las autoridades y miembros de la comunidad educativa abordaron las preocupantes problemáticas de violencia que han afectado a los estudiantes en la zona.

A diario, los estudiantes se han convertido en víctimas de extorsiones y amenazas, ya que se les exige el pago de 1.000 o 1.500 pesos para poder cruzar las denominadas “fronteras invisibles” y llegar a sus colegios.

Además de esta grave situación, se ha observado un aumento en los casos de violencia, tráfico de estupefacientes, presencia de estructuras criminales y prostitución de niños, niñas y adolescentes en los alrededores de las instituciones educativas. Esta problemática ha generado una profunda angustia entre los padres de familia y los propios estudiantes del oriente de Cali, quienes se encuentran en una situación desesperada y no saben qué más hacer.

En ese contexto, el representante Hernando González, quien convocó la reunión, hizo un llamado a los rectores para que los colegios se conviertan en espacios de paz y se materialice ese compromiso mediante el izamiento de una bandera blanca. “Esta mesa de trabajo, más que ser un espacio de diálogo sin acciones concretas, es un compromiso para salvar vidas y alejar a más jóvenes de las garras de las bandas criminales. No podemos permitir que dejen de estudiar debido a la inseguridad. Esta no será la última vez que nos reunamos”.

Por su parte, Johan Daniel Ortíz, representante rstudiantil de la Institución Educativa Isaías Duarte Cancino, resaltó la necesidad de brindar un apoyo adecuado a la salud mental de los jóvenes que viven en entornos marcados por el maltrato y el abandono en sus familias. Para ellos, regresar a sus hogares después de la jornada escolar se convierte en una experiencia traumática, lo cual los empuja hacia la delincuencia y los aleja de la esperanza de tener una vida diferente.