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POLÍTICA

"Soy un concejal auténtico": Terry Hurtado, conozca al activista detrás de la 'relajada' pinta

Terry Hurtado, el activista que logró la tercera votación más alta del Concejo se confiesa. Llegó al cabildo criticado por su pinta y tras la polémica, seguramente, cambiarán el reglamento interno.

27 de enero de 2020 Por: José Luis Carrillo - editor de Cali
Terry Hurtado es todo un ‘anti establishment’, un concejal de nicho, con un discurso animalista y una campaña que le costó $20 millones. | Foto: Foto: Aymer Andrés Álvarez / El País

Terry Hurtado se presentó al hemiciclo del Concejo de Cali con unos jeans desgastados, una camisa polo verde -por fuera-, tenis Convers y 16.481 votos; una de las votaciones más importante para el Cabildo.

Todo un ‘anti establishment’, un concejal de nicho, con un discurso animalista y una campaña que le costó $20 millones. En las primeras sesiones del Concejo desató un debate por su ‘look’, al punto que seguramente modificarán el reglamento de la Corporación. ¿Qué hay detrás de este personaje que está aportando la dosis de rebeldía al Concejo de Cali?

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Terry Hurtado, el activista de la 'relajada' pinta en el Concejo de Cali

¿Quién es Terry Hurtado?

Soy un activista que ha trabajado toda la vida por la liberación animal y la naturaleza. Soy soltero pero tengo una novia, tengo un perro (Mono) y un gato (Damián) con los que creo, tengo lazos de familiaridad. Vivo con mi mamá y no pretendo tener hijos biológicos.

¿Cómo un candidato de nicho como usted logra conseguir 16.000 votos llegando a ser una de las votaciones más altas en el Concejo de Cali?

Fueron 16.481 votos (ríe). Se debe a que provengo de otra lógica, he sido abstencionista toda mi vida por postura política, no por desinterés. He venido trabajando la política profunda, no la política electoral.

Pero no parece, porque uno de los actos de campaña que más tuvo impacto en los jóvenes caleños, fue cuando usted hizo de valla publicitaria y se colgó de un puente en la Calle 5...

Claro, como soy activista sé de campañas de otro tipo, pero no de campañas electorales. Yo sabía de campañas de concientización, de movilización social; entonces utilicé ese aprendizaje como una base para aprender rápidamente cómo funcionaban las campañas electorales.

Dé un ejemplo...

Te doy aspectos claves, no los secretos (ríe). Lo principal fue hacerle saber a la gente que me conocía que yo era candidato. Hay que recordar que nuestra primera candidatura fue hace dos años -a la Cámara- y allí hacemos una reflexión donde las organizaciones animalistas somos conscientes de que debemos poner un pie en lo electoral. En ese momento sacamos 17.200 votos y en Cali 12.600, esa votación nos daba una expectativa alta.

Cuéntenos de esas ideas poco comunes de campaña...

La idea de colgarse del puente de la Calle 5, como una pancarta humana, venía desde la campaña pasada porque hay una asimetría muy tenaz donde hay personas que invierten cientos de millones de pesos para acceder a un cargo de elección popular y otras no. Nuestra campaña costó un poco más de $20 millones pero si se le suman las horas de trabajo de los voluntarios podría ser el doble.

Con los recursos que teníamos escasamente podríamos tener una valla publicitaria, por eso fuimos nuestras vallas. Aplicamos el concepto de necesidad de Manfred Max Neef, no como candencia sino como potencialidad y por eso contamos nuestras ideas usando la imaginación. También usamos muchos memes en redes dirigidos a nuestros amigos y se volvió una bola de nieve.

¿Cuáles iniciativas impulsará ahora que es concejal?

Buscaremos que se concrete la construcción del Centro de Atención Animal, impulsaremos la esterilización obligatoria para perros y gatos.

Apostaremos por la creación de una estación de policía especializada en maltrato animal y temas ambientales... Buscaremos reducir las cargas contaminantes al río Cauca. Deseamos seguir impulsando el tema de movilidad en bicicleta, pero hay que hacerlo bien porque hubo buenas intenciones pero faltó educación. Los cambios no se pueden decretar, los cambios no deben ser empujados. Creemos que Cali está en el momento ideal para pensar un gran festival de arte ambiental y potenciar los talentos de la ciudad, pero que además tenga invitados internacionales que traigan nuevas reflexiones. Impulsaremos la Secretaría de Bienestar Animal.

Los políticos en campaña saludan a todos pero al ser escogidos se olvidan de sus electores, ¿usted se convertirá en uno de ellos?

En campaña estuvimos trabajando en el concepto de democracia abierta por que los concejos, asambleas y el Congreso ponen una cortina de hierro. Yo creo que hay que recuperar el sentido del origen de la democracia directa y para ello hay que establecer una comunicación con el electorado, para eso estamos tratando de construir una plataforma, para que, con las personas que nos sentimos identificados, mantengamos una comunicación y debatamos con ellos los proyectos de acuerdo que se discuten en el Concejo.

¿En su campaña recibió apoyo de sectores políticos tradicionales, del actual Alcalde de Cali, por ser ambos del Partido Verde?

Un apoyo de Carlos Martínez (actual secretario de Turismo) y de nadie más. De todo el Movimiento Animalista y Ambientalista de Cali.

¿Actualmente tiene cuotas o cargos burocráticos en esta Alcaldía?

Yo le propuse a Jorge Iván Ospina que uno de los elementos que pueden ayudar en la transparencia es que, como sucede en otras partes del mundo, el gobernante le dé abiertamente una delegación de responsabilidad a un partido político en ciertas áreas y secretarías; por ejemplo, que el partido X se encargue de la educación, y el partido Y del medio ambiente y ellos le respondan a la ciudad.

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¿Y Ospina si le hizo caso?

Lo intentó...

¿Ospina le dio alguna participación en la Alcaldía?

Tenemos algunos amigos y en la Secretaría de Bienestar Animal la expectativa que tenemos es que esté abiertamente bajo nuestro control político.

Es que con la tercera votación más importante del partido Alianza Verde al Concejo y siendo de la misma colectividad del Alcalde se podría pensar que tendrían una mayor participación en esta Alcaldía...

Abiertamente lo planteé. Nosotros teníamos una expectativa de poder asumir la dirección del Dagma, pero Jorge Iván Ospina escogió una persona que de todas maneras es un hombre capaz (Carlos Calderón).

¿Era su candidato para la dirección del Dagma?

No es nuestra persona.

Si tuviera la oportunidad de ser un animal, ¿cuál sería?

Yo soy animal y vos también...

Tiene razón. ¿Qué otra especie de animal le gustaría ser?

Me gustaría tener la mirada y la experiencia de muchos animales para tener una visión distinta del mundo. La percepción de vivir es distinta en una hormiga, una mariposa, un leopardo, un animal marino. Me encantaría obtener un periodo de tiempo en cada uno.

¿Usted se considera un concejal rebelde?

Me considero un concejal auténtico y como tal llegamos al Concejo a continuar con la causa en la que he estado toda mi vida y si eso es considerado rebeldía, ¿qué podemos hacer? No me puedo moldear a estructuras que no corresponden a nuestro proyecto político.

Respecto a la polémica por su manera de vestir en el hemiciclo, ¿no cree que pese a nuestros gustos personales, las instituciones -como el Concejo- tienen códigos que van más allá del yo?

Lo primero que hay que recordar es de dónde viene el traje como elemento simbólico de las instituciones y se remonta un par de siglos atrás al reinado de Carlos II de Inglaterra y lo impuso en la aristocracia inglesa como una medida de austeridad y eso termina siendo el saco y la corbata. Mirá como seguimos teniendo estéticas de un referente colonial.

¿Usted cree que cambiarán el reglamento interno del Concejo con respecto a cómo deben presentarse los concejales?

Hay la disposición de todos los concejales y ese es un elemento para llamar a la reflexión... cuando uno llega a un lugar y le dicen que tiene que ser de un formato preestablecido, es el poder ejerciendo sobre el cuerpo de otras personas.

¿Cree que ganó ese ‘round’?

Creo que le hicieron un favor a la sociedad, a mí lo que me interesa es discutir sobre la cultura, entonces cuando me ponen algo tan baladí como el formalismo y me permiten llevarlo al plano cultural y hacer una discusión social ponemos a la gente a pensar sobre algo que tiene una capa de fondo interesante. La discusión llegó a tal punto que la Revista Ámbito Jurídico hizo dos artículos sobre el tema y una de las posiciones era que la gente podía vestirse como quisiera.

Hoy, algunos juzgados de la ciudad no atienden a la gente si se presenta en pantaloneta...

Eso es una violación a los derechos, no puede ser posible que la justicia de este país le cierre a alguien la atención por su vestimenta. Esa es una medida altamente discriminatoria.

¿Algunas vez usó un traje formal?

Sí, hace 20 años. Y me lo puse porque me dejé moldear y me sentí terriblemente mal... y nunca debemos renunciar a nuestro libre desarrollo de la personalidad, pero peor aún si hacemos un ejercicio político no podemos dejarnos moldear.

Después de la polémica en el Concejo se le vio llegando con camisa al hemiciclo, ¿las criticas lo afectaron?

No, yo tengo algunas camisas y ese día me la puse porque, creo, era la posesión de la Contralora, pero yo no me siento mal usando camisas, de hecho me encantan las guayaberas.

¿Cómo mitiga usted su huella de carbono?

Ando en bicicleta pero la tengo pinchada, por eso no llegué a esta entrevista en ‘bici’. Me muevo, sobre todo, en transporte público.

¿Cómo llegó a esta entrevista?

En taxi porque salí corriendo del Concejo para acá (Parque del Perro) y no tenía tiempo para tomar el MÍO. Me gusta caminar mucho y algo importante en mi huella de carbono es que soy vegano y el primer factor de huella de carbono es la ganadería.

¿Con esos 16.481 votos se le han acercado los círculos de poder a ofrecerle algo?

No, esos círculos de poder no se han acercado por tres razones: La primera es que mucha gente cree que sacamos esos 16.481 votos de ‘chiripazo’. Lo segundo es que hay mucha gente que juzga los libros por la portada y creerá que no hay un interlocutor al frente y por último hay algunas personas que piensan que soy un fanático, un extremista, un intransigente y que no soy capaz de escuchar y en eso se equivocan.

Preguntas rápidas...

¿Cuál es su rockstar político favorito?

Si respondo esa pregunta quedaría como si fuera uribista, petrista o fajardista y yo soy leonardo- davincista. Diría que Berito Cobaría, un líder de la comunidad U'wa, un hombre que desde su dignidad enfrentó una multinacional que quería explotar petróleo en el Parque Nacional del Cocuy. Fue el primer colombiano en ser galardonado con el premio Goldman (también conocido premio Nobel de medio ambiente). Otro referente político es Carl Sagan, porque es un hombre de una mirada holística.

Pero debe tener alguna afinidad por algún político...

Vandana Shiva (activista en favor del ecofeminismo); Molly Scott Cato (política verde británica, y economista); son líderes con un compromiso ambiental.

¿Con qué canción se definiría usted?

‘Libre’ de Nino Bravo o ‘Un Animal de Galaxias’ de Silvio Rodríguez.

Me gusta mucho una canción de Pedro Guerra que se llama 'Contra el Poder'. ‘Sobreviviendo’ de Víctor Heredia y el Amor es Fuerte de, Tango Feroz.

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