Gobierno se pronuncia sobre muerte de escolta de la UNP en Suárez, Cauca

El Gobierno Nacional, a través del viceministro de Relaciones Políticas del Ministerio del Interior, Francisco José Chaux, se refirió este sábado al asesinato del escolta Fabián Eduardo Rivera Penagos en el corregimiento La Betulia, de Suárez, norte del Cauca. 

El escolta, adscrito a la Unidad de Protección Nacional, UNP, se encontraba de permiso y fue hasta Suárez a visitar a su novia. Minutos después fue raptado por hombres armados y apareció este sábado asesinado en una zona boscosa. 

Fabián Eduardo Rivera Penagos era oriundo de San Francisco, zona rural de Toribío.

"El Gobierno rechaza y lamenta la muerte del escolta Fabián Rivera, que caiga todo el peso de la ley para estos bandidos que ocasionaron la muerte de esta persona", dijo el Viceministro desde Armenia, donde acompaña una comitiva del presidente Iván Duque.

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El escolta asesinado prestaba protección a Bernardo Sisco Noscué, miembro de la JAC de Corinto y líder indígena. 

"Por orden del presidente Iván Duque, la Unidad Nacional de Protección ha enviado una unidad al líder social Sisco para que no corra peligro su integridad física", agregó Chaux.

El funcionario no se pronunció a cerca de un supuesto 'plan pistola' de los grupos armados que delinquen en el norte del Cauca contra las personas que protegen a líderes sociales y guardia indígena. 

"Vamos a iniciar la investigación para dar con los responsables y velar porque les caiga todo el peso de la ley", precisó el Viceministro.

Después del hallazgo del cadáver de Rivera, se conoció del el ataque armado a otro integrante de la UNP, quien se movilizaba en una camioneta, la cual terminó impactada por disparos de arma de fuego.

El agente salió ileso de esta situación, presentada al nororiente del Cauca en medio de la situación que sucedió con el ataque a los integrantes del Resguardo de Tacueyó, donde cinco comuneros fallecieron.

Por su parte, el presidente Iván Duque señaló que: "los responsables de asesinatos en el Cauca son narcotraficantes y estructuras disidentes que han tratado de intimidar a las comunidades. Esta situación es consecuencia de aumento de cultivos ilícitos que se presentó en años anteriores. Este Gobierno frenó esa tendencia".