Leonor González Mina, tras su muerte, así recuerdan a la ‘Negra Grande’ en Robles - Cauca; uno de sus hermanos habló con El País

Alegre, colaborativa e incluso algo ‘fregada’, esas fueron algunas de las cualidades que Robertulio González destacó de su hermana, Leonor González Mina, a quien recuerda con algo de nostalgia luego de la noticia de su fallecimiento.

El hermano de la ‘negra grande de Colombia’ contó algunas anécdotas de la vida familiar y artística de Leonor González, en charla exclusiva para El País, sentado en la sala de su casa, a tan solo pocos metros de la casa familiar en la que se criaron.

Tal como si lo estuviera viviendo en ese momento, RoberTulio recordó entre risas que, a pesar de pertenecer a una familia religiosa, Leonor González siempre mostró desde pequeña su curiosidad ante el mundo, sin pensar que algún día llegaría a ser grande.

“Era bastante difícil, era bien fregada, no obedecía mucho en la casa, y de pronto salía con amigas, pero siempre retornaba a la casa. La abuela era testigo de Jehová, y por parte de mi papá eran católicos, inclusive yo iba a los cultos evangélicos y me gustaba cierta música porque ahí venían padres gringos”, contó Robertulio.

Incluso, el hombre narró que Leonor también asistía a algunos de esos cultos, y que tal vez de ahí fue que se despertó su gusto por la música que, años después, la hizo desplazarse hasta Cali para poder estudiar música.

“Ella tuvo formación y empezó a cantar, venía aquí al pueblo y pudo llegar a contactarse con Manuel Zapata Olivella, quien le ayudó en muchas cosas de tipo personal y profesional. Fue un negro muy importante en Colombia y con él fue que salió de aquí a Robles a Bogotá e hizo su viaje a Europa”, dijo.

Con dificultad, pero a la vez con mucho orgullo, Robertulio aun canta algunas de las canciones de su hermana, comentando que incluso ese camino artístico de Leonor es respetado en Robles, hasta el punto de que era bien recibida y en las escuelas todavía cantan sus canciones.

“Hace como unos 6 o 7 años fue la última vez que vino. Se acordaba mucho del pueblo, de las costumbres, de la gente. Ella se sentía muy robleña, me parece importante, ella siempre pensó en su pueblo y se dejó orientar. Incluso comenzó cantando algunas canciones de aquí, pero después se interesó mucho en la música colombiana”, reveló Robertulio.

Aunque hoy Leonor González ya no lo acompaña en La Tierra, Robertulio se quedó con la imagen alegre de su hermana, la misma que no dudaba en sacar a relucir sus dotes artísticos en cada uno de sus encuentros.

“Yo estuve con ella en un cumpleaños que se hizo en Jamundí que fuimos a un sitio interesante y agradable, ahí estuvimos hablando. No estaba sana sana, pero sí estuvo activa, cantó y bailó ahí”, relató Robertulio.